Capitulo 2:El Nuevo

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Me mire al espejo ya con el simple uniforme del colegio. Llevaba una chomba blanca con rayas verdes y rojas en su cuello. El pantalón era de un azul marino muy oscuro e incomodo con las mismas lineas que la remera. Teníamos suéteres y buzos, pero con el calor que hacia, preferí ir así nomas. Me puse mis zapatillas negras y baje hacia la cocina.

Comí mi desayuno mientras que mi papa organizaba todas sus cosas en su mochila y al terminarlo, agarre la mia con las carpetas y útiles nuevos que, probablemente, en tres semanas los perdía.

Llegamos al colegio diez minutos antes de las ocho, el horario donde empezaba la jornada y mi papa me dijo

-Lauti, este es un año nuevo. Vamos a empezar de vuelta y vamos a sobrepasar todo, porque lamentablemente, así es la vida hijo, las cosas buenas van y vienen y las malas casi siempre están presentes. Vamos a tratar de poder hacer que todo vuelva a la normalidad después de este verano de mierda que tuvimos. Estas de acuerdo?-

-Completamente de acuerdo pa-

-Bueno dale que llegas tarde- me dijo abriéndome la puerta -Chau te amo- y después de un beso en la frente, el arranco su auto y yo entre a la hermosa y educativa prisión.

Ya me estaba adentrando a la nueva aula que iba a ser nuestra por un año entero:"1°b".

-Holaaaaa- me sorprendió michela al segundo que entre. Ella suele ser loca y divertida, siempre, aunque este deprimido o bajoneado, puede hacerme reír con sus pelotudeces.

-Hola- respondí yo con ganas de matarme al ver el horario y leer que en la primera hora teníamos lenguaje en ingles.

-Que te pasa che?- dijo decepcionada.

-No se miche creo que es el primer día de colegio y la verdad que muchas ganas no tengo de venir y tener que estudiar y copiar con las putas tare...-

-Bueno bueno , que esta pasando acá?- interrumpió mica mi super mal humor. No podía creer todo lo que la había extrañado. Estaba linda como siempre y con su cola de pelo bien alta.

-Nada perdón michus-

-Jelou- dijo santi. Ah para. Me olvide de contarles algunas cosas creo. Mi verano fue una completa mierda pero hubo una época que para distraerme, mi papa me mando a la aburridisima colonia del barrio. Lo único que hacíamos era jugar al fútbol, ir a la pileta y merendar. Jugar al fútbol, ir a la pileta y merendar, etc. Todos los putos días. Por suerte Mateo fue para estar conmigo, pero como había perdido un poco la confianza, no hacíamos mas que reírnos y hacer boludeces, lo cual significaba que no tenia a nadie a quien contarle como me sentía. Obviamente podría haberle mandado mensajes a mica o a miche, pero las hijas de puta se fueron: una con el papa a dubai y la otra con la familia a viajar por el mundo. Se querían quedar para poder estar ahí para mi pero no las deje, no las iba a dejar perderse dos viajes así por mi. Bueno cuestión que no tenían buena señal y hablamos muy poco. Ahí es donde aparece santi al rescate. Sinceramente, siempre había pensado que era típico pelotudo que se creía el rey de Inglaterra y que tenia mil amigos iguales a el, pero resulto ser todo lo contrario. En uno de los días merendando en la fucking colonia, se me acercó y me dijo:
-Eu boludo no sab- se habia confundido de persona. En ese momento de verdad me decepcione. Pense que habia logrado tener nuevos amigos- ah sory pense que eras otra persona-
Yo respondi muy vagamente
-No no te preocupes no pasa nada-
Cuando se estaba por ir se dio vuelta y se sento al lado mio mientras agarraba una galletita de chocolate del bowl.
-Mirá- empezo a hablar. Sinceramente no se qué estaba pasando- ya se que pensas que soy alto boludo porque lo escuché en el colegio pero creo que podes cambiar de opinion- pense que no me había identificado pero me había descubierto.
-Yo no pienso que sos un bo-
-No me mientas ya sé- okey listo ya sabía, ahora tenía que escucharlo- se que tuviste un año muy duro y que la pasaste para el orto- DIOS ESTE COLEGIO DE MIERDA. NO SE CALLAN UN SEGUNDO- por eso te digo que estoy acá. Para cualquier cosa-
-Solo lo haces para demostrarme que no sos un boludo-
-Un poco si, pero también porque me gusto lo que hiciste con Miche-
Desde ahi somos bffs. Joda. Fuimos amigos desde ese momento y ahora estamos mas unidos que nunca. Estaba feliz porque sabia que ahora tenía a alguien a quien le podía contar como me sentía y que me escuchara.
Volviendo al colegio, estabamos Miche, Mica, Santi y yo sentados en dos mesas( una frente a la otra ) hablando de boludeces. Extrañaba eso.
-Bueno gente, todos a sus lugares vamos- entro Mirta a la clase, nuestra nueva preceptora, a ver quienes faltaban. Todos nos sentamos como queriamos. Me tomare un segundo para explicarles los asientos. El pizarrón a maracador estaba en frente y desde nuestro punto de vista, la puerta estaba a la izquierda y el escritorio donde se sentaba la profesora estaba a la derecha. Desde el pizarrón eran tres filas con cuantro mesas cada una. Yo me sente con Mica en la esquina al lado de la puerta y miche se sento sola atras nuestro. Santi ya se habia ido con su grupo de amigos que si eran boludos. Cuando Mirta termino de nombrarnos a todos para ver si estabamos, se paró frente al pizarrón, y aplaudió un par de veces para que nos callaramos y le prestaramos atención. Mientras todos empezamos a sacar nuestras cosas de las mochilas, dijo su discurso:
-Bueno chicos este año entra un alumno nuevo al colegio. Su nombre es Lucas y quiero que lo traten bien para que se sienta cómodo. Pueden?- todos respondimos un si en estado zombie. Realmente a nadie le importaba- bueno estará llegando en unos minutos. Tengo que ir a tocar el timbre de las ocho, buen comienzo chicos- Mica fue la única que le dijo gracias y nos reímos. Era muy buena.

Lucas
Nuevo colegio. Todo iba a ir bien. No pasa nada. Eso tenia que pensar pero no estaba convencido. Y si no me aceptaban? Y si me trataban como basura? Y si..
-Dale Lucas bajate que tengo que ir a trabajar y los dos estamos llegando tarde- se escucho el timbre desde adentro del instituto.
-Bueno Bueno- le respondi a mama con mal humor.
-Suerte hijo!- hice como que no la escuche.
Aunque ya habia llegado tarde me dejaron pasar sin anotarme y me explicaron como llegar al aula. Había que subir las escaleras a nuestra derecha, de lado al laboratorio, y atravesar una puerta. Desde ahí, a la izquierda la ultima puerta. No era tan difícil. Abrí la puerta y una mujer paso corriendo con unos papeles en la mano. Me sobresalté por un segundo y seguí caminando. Por las ventanas en las paredes veia a todos los alumnos ríendose y hablando pero en sus respectivos lugares, ya que la profesora estaba nombrando donde debían sentarse. La última puerta tenía un cartel arriba suyo y decía "1*A". Yo no estaba en primero A estaba en primero B. Busqué el cartel que diga primero B y estaba justo al lado.

Lauti
Entro nuestro nuevo compañero abriendo la puerta muy despacio para que no nos dieramos cuenta.

DoverDonde viven las historias. Descúbrelo ahora