Christopher
Había dedicado todo mi maldito tiempo en empacar lo necesario para pasar unos días en Londres.
－¡Diablos! Mi vuelo saldrá en una hora y mi secretaria no llega con el auto－dije gritando
Intente calmarme y tome mi celular. Llame a un taxi ya que no esperaría ni un minuto más. －Si, ¿taxi? Necesito qué me lleve a el aeropuerto, si, si aquí lo veo.
Que taxi tan más lento solo me queda media hora para que mi equipaje y yo abordemos el avión, después de unos veinte minutos logre llegar al avión pero el vuelo fue horrible. －Estúpidos viajes de negocios－murmure. Hay muchos niños jugando y haciendo ruido ¿Por qué tienen que ser tan molestos?.
¡DEFINITIVAMENTE ODIO A LOS NIÑOS!
Después de dos horas de insoportables niños, mi empleado Caig me llama.
－¿Jefe?...－pregunta nervioso
－Si－respondí
－Los superiores me han informado que el viaje de negocios durara más de lo esperado tal ves unos cuatro meses－explico
－¡Cuatro meses!, oye no tengo tiempo para esto deja de bromear－grite al teléfono.
－Perdón son las indicaciones.
Cuatro meses viviendo en Londres, ¿Dónde viviré?, Esa pregunta rondaba en mi cabeza, no podré vivir en un hotel cuatro meses, además eso es mucho tiempo espero no pase lo mismo que el año pasado en Alemania un mes se convierto un siete y después un año.
Tome el teléfono y llame a mi secretaria.
－Hola, si necesito un apartamento cerca de mi nueva oficiana.
－Sólo hay un apartamento cerca de ahí pero parece que ya ha sido rentado, te llamare si lo consigo－dijo con miedo.
Cuelga e intentó dormir y cuando por fin los consigo mi celular suena. Es mi secretaria.
－¿Lo conseguiste?－pregunte
－Eso creo－con un tono de voz no muy convincente.
－Bueno hable con el propietario y hay un pequeño problema lo veras cuando estés ahí.
－Espero no hayas es hecho nada estúpido－dije un poco enojado.
Al final llegue a Londres a las dos cuarenta y cinco PM. Mi secretaria me mandó la dirección del apartamento así que tome un taxi y me dirigí ahí pero cuando llegue me percate de que aún no tenía las malditas llaves, espere afuera sentado sobre la acera a que el propietario o mi secretaria llegarán pero parece que aún tardarán un rato, después de cuarenta minutos el propietario llego en un auto con un chico debo decir que era un chico muy atractivo y pequeño, sus ojos eran azules y eso le daba un aire de ternura. Parecía que tenía unos ¿20? Años.
El propietario se acercó a mi y yo le pedí las llaves del apartamento pero el en ves de eso me miro con cara de confusión como si el supiera algo que yo no, ¿Acaso era eso de lo que hablo mi secretaria? ¿El chico era el pequeño problema literalmente?.
－Señor Christopher T. el apartamento ya fue rentado por este joven.- dijo señalando a el chico.
En el momento en que dijo eso solo quería matar a mi secretaria, ¡Yo quería ese apartamento!. Estaba ahogado en mi furia pensando en los días que pasaría en un hotel para buscar otro apartamento pero mientras pensaba algo se posa en mi hombro así que dirijo mi cabeza en dirección al objeto desconocido y puedo identificar que el chico que estaba con el propietario posó su mano en mi hombro, mire sus ojos el me veía directamente y parecía con intención de decir algo.
－Disculpe señor el propietario no ha terminado de explicar usted y yo viviremos juntos.
