Cuentan que tenías la sonrisa más grande de toda la costa.
Que hacías bailar a cualquiera en 0,
que creías en el karma y en los besos robados.
Yo te cuento con los dedos de las manos.
Cuento contigo.
Cuento con que rozo contigo.
Cuento los días que nos separan,
los kilómetros,
Las heridas.
Se cuentan cosas,
más cosas sobre ti.
Más de las que te imaginas.
Pero yo decido en el punto más alto que encuentro
que es lo que yo puedo contar.
Cuento con tus batallas,
con tus cicatrices.
Cuento con los que te hirieron,
con los que te apoyaron.
Cuento con tu manía de sacar la lengua,
con tus chistes malos.
Cuento con tu risa,
con tu cara de indiferencia.
Cuento con tus malas rachas,
con las increíblemente buenas.
Cuento con tus amigos,
tu familia,
tus ex's.
Cuento con tu apetito,
tu maña en la cocina.
Cuento con tus lunas,
tus noches,
con tus mordiscos,
tu marca personal.
Y después de todo lo que puedo contar,
Quiero seguir contando contigo.
Quiero contar lo que son 27.
Los días para verte,
tus historias por las noches.
Quiero contar contigo lo máximo que me permita la vida.
O lo que me permitas tú.
De todas formas,
estaré encantada de convertirme en lienzo,
o musa.
Puede que saco de boxeo,
o paño de lágrimas.
Pero sea como sea,
tus huellas dactilares,
tu marca personal
sobre la piel.
Que has cambiado las puestas de sol.
Que ahora no acaba un día sin tu recuerdo presente,
siempre
con un ojo más achicado que el otro.
