Desafío

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Me levanté de mi butaca sin soltar el vaso y caminé en dirección a mi nuevo trofeo. Cuando estaba ya centímetros otro hombre arremetió contra ella.

- ¡Oye! Fíjate por donde caminas- farfulló al joven que se alejaba, parecía algo pasado de copas, pero no le preste mayor atención tenía otros planes más importantes que demandaba todos mis instintos ya en marcha.

-En definitiva, eres una quejumbrosa- la vi directamente a los ojos y sentí nuevamente ese escalofrío, sonreí.

-En definitiva, tú eres un acosador- su cuerpo tomó una postura diferente que no había visto antes, no en chicas al menos, parecía desafiante.

-No querida, no lo soy, te he estado viendo cómo te quejas desde que tu amiga te dejó, pero no significa que lo sea- arqueé mi ceja sin quitar mi vista de sus ojos.

-Ah no ¿cómo se le llama entonces? -Su postura era firme.

Esbocé una sonrisa burlona y di un sorbo de mi whisky.

-Mmm... ¿observar a una chica guapa como se queja? Mi nombre es Kobe y tú eres.

-Mi nombre es Elizabeth.

-Mmm... entonces ¿te puedo decir Eli?

-No, sólo soy Eli para los amigos.

Pase mi vista a sus labios y luego volví a sus ojos.

-Por favor Elizabeth nos llevamos tiempo conociendo ¿No me consideras tu amigo? -me acerque un poco más intentando acortar la distancia.

-Apuesto que es la conversación más larga que has tenido con una mujer- sus ojos parecían chispeantes.

<<Si tan solo supieras querida>>

-No, en eso te equivocas precisamente cuando te observaba dialogaba con una chica- Realmente no conversaba con ella, solo le dije al barman que le diera un martini de mi parte.

-Ya ves como si me acosabas.

-Me descubriste, pero si viste yo te observaba ¿es por qué tú también lo hacías? -sentí nerviosismo en sus ojos y aproveché ese instante para acercarme un poco más.

-Claro que no- respondió en seco.

<< a ver cómo te zafas de esta >>

-Por favor Eli, sabes que te gusto- bebí un sorbo de mi trago y noté que fruncía el ceño algo molesta por mi afirmación.

- ¿Tu gustarme? Por favor como vas a gustarme si apenas te conozco -ella dio un ligero paso hacia atrás.

- ¿A caso no crees en el amor a primera vista? -musite.

- ¿y tú sí? - presentí algo de inseguridad en su respuesta.

-Lo supe desde el momento que te vi preciosa- le sonreí con malicia.

Estaba tan pendiente de ella que no presentí su llegada, hasta que ya lo tuve encima y con una de sus manos sobre el hombro de Ella, haciendo notar su presencia. Dirigió una mirada fulminante y yo hice lo mismo.

- ¿Estas bien Eli?

-Eh... Esto si Max- respondió confusa.

Miré a Max incrédulo.

<< ¿cómo es que él está aquí justo en el mismo bar? Tomando posesión delante de la chica como si le perteneciera, pero eso no echaría a perder mis planes y no con ella, no sin antes descubrir que maravilloso encanto me había embrujado>>

-No te preocupes Max ella está en buenas manos- lo miré desafiante sin dejar de sonreír.

Ella no parecía entender nada de lo que estaba sucediendo entre nosotros, miraba de uno a otro con el rostro interrogante.

-No me preocupa en que manos este, menos en las tuyas -Gruñó.

- ¿A caso ustedes dos se conocen? - ella nos interrumpió.

-Si, ya conoces a mi hermano, del que alguna vez te hable -Max me miraba molestó.

-Tú le has hablado de mí, pero tú nunca me hablaste de ella... - la contemple con hambre y posee mi vista en sus labios.

<<Max pareció notarlo>>

-Porque ella no es algo que a ti te interesé -Max comenzaba a tensar la mandíbula, mientras yo tomaba una postura más dominante.

<<Eli parecía estar incómoda en medio de nuestra pequeña riña familiar>>

-Hermanito ¿tú no cambias verdad?

Max soltó el hombro de Cat y embistió contra mi dorso, obligándome a salir de mi asiento lejos de ella.

- ¡¿Qué demonios te pasa Max?!- su empujón ya comenzaba a molestarme, se detuvo hasta dar cuenta que ya estábamos bien lejos.

- ¡No quiero que te acerques a ella Kobe! - estaba molestó.

- ¿Qué quieres decir hermanito? Ella no es una niña para que la estés cuidando... Además ¡¿quién te crees que eres su padre?!

-Ella... Ella es mi amiga- dudaba con su respuesta.

Clave mis ojos en los suyos intentando comprender que pasaba por su cabeza, estaba tenso y a la vez incómodo, pasaba la mano por su cabello nervioso sin dejar de sostener la mirada.

<<¡¡Oh no!! ¡¡Ni en BROMA Max...!! ¡Te gusta! ¡Maldita sea Max!>>

- ¡Ella!... ¿No piensas que es solo tu amiga verdad Max? - sentí que la temperatura de mi cuerpo se elevaba y mis músculos se tensaban, no sabía si era producto del trago que había bebido o la revelación me había molestado más de la cuenta.

- ¡Eso no te incumbe! Solo vete kobe... Anda ve con todas esas mujeres que tienes en casa, ella merece algo mejor.

- ¡¿Que sabes tú si yo soy mejor para ella?! - apreté mi puño y me acerqué a Max quedando sólo a centímetros de él.

-Solo vete Kobe- miró en dirección a Elizabeth, que parecía feliz con sus amigos que se habían integrado junto a ella.

-Me largo Max, pero no porque tú me lo digas- miré a Elizabeth y sentí una corriente por mi espalda- Ya nos veremos Hermanito.

Max pareció triunfante, se alejó de dónde estábamos y camino en dirección a su grupo amigos. Suspire profundo y gire hacia la puerta, sentía varias miradas volvían a posarse en mí, pero no les preste mayor atención. Solo había una que me interesaba.

Subí al coche y arranque para posicionarme solo un par de metros del bar.

-Este juego se pone interesante y no te voy a dejar ganar tan fácilmente Max.

A veces solíamos hacer este tipo de cosas cuando éramos adolescentes no requería de mucho esfuerzo para salir victorioso y eso hacia que Max me guardara rencor o al menos eso me parecía.

Las horas pasaban rápido cuando noté que la gente comenzaba a salir del bar, con tantas personas saliendo se dificultaba encontrarla, hasta que al fin di con ella, estaba despidiendo a sus amigos. Esta era mi oportunidad de acercarme, arranqué el vehículo y encendí la radio con el volumen al máximo. Llegué justo a tiempo antes que subiera a un taxi, comencé a seguirla con el Lamborghini mientras ella caminaba por la acera hasta quedar a su altura. Baje la ventanilla esperando encontrar sus ojos.

-Querida deberías de disimular más que te caigo mal.

-No me caes mal, no te conozco y tu presencia me molesta.

-No te preocupes tenemos mucho tiempo para conocernos mejor preciosa- sonreí con picardía.

- ¿Y a ti quien te dijo que yo te quería conocer mejor?

<<Está chica no deja de llevarme la contraria y me encanta>>

-Me lo dice tu mirada, me desafías y por eso sé que te gusto.

-Eres un arrogante ¿lo sabias?

-Y tú eres tan desafiante y hermosa ¿lo sabias? - Fijé mi vista en sus ojos- ¿Te llevo?


Eternamente TuyoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora