Su sonrisa la derretía igual que cuando era jovencita.
Entonces, significaba que le gustaba y ahora, que la encontraba deseable. Con los ojos le decía que necesitaba volver a tenerla entre sus brazos, volver a besarla.
Solo pensarlo le provocaba una necesidad urgente de intimidad sexual.
Se encontró a sí misma apretando los muslos para encerrar y capturar la excitación. Sus pezones se habían puesto tan duros como pequeños capullos. Nunca había reaccionado de una manera tan física con ningún hombre. Estaba aturdida por la gran diferencia que existía entre querer a alguien de lejos y tener al objeto del deseo al alcance de la mano.
¿Qué habría pasado si la hubiera mirado así a los dieciséis años... si la hubiera besado?
Sakura meneó la cabeza. Tenía que dejar de pensar en el pasado.
-¿En qué estás pensando? -preguntó Naruto.
-Estoy muy sorprendida de que estemos aquí juntos... tú y yo -respondió con más verdad de la que él podía imaginar.
-El destino nos ha unido.
-¿Realmente crees en el destino? -le preguntó riéndose.
Él se encogió de hombros.
-Algunas circunstancias fortuitas son extrañas... Cosas que suceden en el momento apropiado en el lugar apropiado. Quién sabe cómo funcionan esas cosas. ¿Es simplemente suerte o se trata de algo más? Quizás siempre estuvimos destinados a encontramos aquí y ahora...
A Sakura se le puso piel de gallina.
-Siempre podía haber dicho que no a tu invitación.
-Pero no lo hiciste.
Él no esperó una respuesta. Sus ojos capturaban los de ella con verdadera intensidad.
-Tengo el presentimiento de que te he estado esperando mucho tiempo -añadió con dulzura.
Sakura pensó que podía haberla encontrado sí hubiese querido. Aunque, pensándolo mejor, él no sabía quién era ella. Se sentía muy confundida. Tal vez debiera decírselo todo. ¿Y ver cómo cambiaba su sonrisa por una expresión de sorpresa, de vergüenza? No; no quería eso.
-Quizás estuvimos juntos en una vida anterior-dijo Sakura con ironía.
-Y algo nos separó -añadió Naruto con un brillo en mirada que la hacía sentirse incomoda, como si él pudiera leer sus pensamientos.
-Una fantasía muy romántica -señaló fríamente mientras tomaba el vaso de vino para romper el contacto visual.
Hubo un momento de silencio, después él se rió para relajar la tensión que había creado.
-Creo que me gusta la idea de las segundas oportunidades. No siempre acertamos a la primera.
-Es cierto -confirmó Sakura-. Aunque, para que te haya ido tan bien en tu negocio, debes haber tomado un montón de decisiones correctas.
-Bueno, Shikamaru y yo vimos la ocasión; sobre todo, con el rápido crecimiento de Internet -respondió con naturalidad.
Sakura dejó el vaso en la mesa y se inclinó hacia delante, ansiosa por saber más sobre su vida.
-Perdona por ser tan ignorante; pero, ¿qué es exactamente Promociones Multimedia?
-Una empresa de publicidad.
-¿Quieres decir que diseñáis cosas para que otras empresas se anuncien?
Él asintió con la cabeza.