aventuras

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Estuve por al menos cinco minutos recostada en el aula.
El telefóno celular comenzó a vibrar dentro de mi bolso, así que lo cogí con rapidez, como había pensando era del teléfono celular de Hinami, abrí el texto: "kazumi saldré tarde"- al final colocó una carita llorando, no podía parar de preocuparme, no quería que llorara o se preocupara, cada vez me parecía más a una madre o me estaba convirtiendo en una mucho antes de lo que tenia planeado, sólo conteste con un de acuerdo y muchas manos con el índice arriba tratando de animarla aun más, luego escogí un pequeño video que había bajado para niños, pasaba mucho tiempo pensando en ella y cosas que le gustan, para hacer que se sienta cómoda y protegida con su inexperta hermana mayor, le mande el video por Line y al final sólo le puse divierte, no hubo contestación de ella pero había marcado como leído así que supuse que todo estaba en orden.

Cuando guarde el celular en el bolso pensé que ahora que no podría faltar a esa clase sin ningun pretexto que justificara la falta, hacer acto de presencia en el gimnasio, mientras fui a mi taquilla en la sala deportiva me daba ánimos para poder colocar mis enormes pies en ese lugar, tenía miedo de perder el control bajo situaciones de provocación, no quería causar un daño mayor a alguien y quedar expuesta, no podría darme el lujo de hacer algo tan egoísta cuando tenía a una pequeña a mi cuidado, tenía miedo de no poder protegerla.
A pasos cortos y temblorosos camine hasta llegar al gimnasio de la escuela, era primavera, el sol hacia que la cancha al aire libre fuera el peor sitio para la clase en verano, así que el gimnasio parecía un buen lugar, me coloque en las gradas a mirar lo que los demás hacían, lanzaban, evitaban, jugaban, todo tipo de cosas deportivas.

El profesor hizo resonar su silbato por todo el gimnasio quemando los tímpano de algunos y a otros provocandoles un terrible susto, nos reunió a todos en el centro de la cancha para jugar un partido llamado parfult, el juego consistía en tener una pareja con quien jugar unas contra otras hasta obtener el número mayor de goles, pero tienes que tener mucha coordinación con tu pareja de esta forma Serán los ganadores, como era de esperar al momento de formar parejas nadie me elegía pero esta vez Shizuka había quedado sin pareja de modo que sus otros dos amigos había sido elegidos por chicas, el no era tan popular entre las niñas no por ser menos atractivo sino por que su carácter alejaba a cualquier chica de su camino, fue el momento más incómodo, era un chico super pesado egocéntrico sin duda alguna perderíamos el primer torneo.

Comenzamos jugando bien, nuestra cordinacion era basta para pasar a la segunda ronda, lo que para mi significaba una gran sorpresa, no entendía pero parecíamos estar en coordinación uno con el otro, sentí un extraña sensacion de conexión pero no era como ese tipo de conexión amorosa había algo más en ese chico.
La segunda ronda continuó, vencidos a todos los que quedaban, sólo nos faltaba el último partido donde solo habían cuatro parejas y de esas solo dos obtendrian el puntuje alto, realmente necesitaba ese puntuje entonces supuse que si seguíamos haciendo lo que habíamos hecho, tendríamos una oportunidad.

Díaz minutos pasaron rápidos y eliminamos a la primera pareja, pasaron doce minutos más y la segunda fue expulsada por haber cometido una falta, sólo quedábamos dos parejas en la cancha ambos estábamos agotados, le propuse tener un estrategia nueva en equipo pero no escucho, el silbato sonó de nuevo y comienzo el partido nuestro equipo estaba en la zona del equipo contrario pero escuche mi nombre a lo lejos, mire hacia aquella voz y de repente un balón de basquetbol impactó mi frente con velocidad que caí al suelo, nadie se movió por unos segundos, se quedaron perplejos por lo que había sucedido y momentos después perdí el conocimiento.
Sólo podía estar seguro de algo el profesor no se encontraba en la gimnasio en ese momento.

Desperté a los cinco minutos después en la sala de enfermería, a mi lado se encontraba el profesor de Deportes, el maestro de la clase, Shizuka y la enfermera colocando un líquido refrescante y una bendita con desinflamante en mi frente, sólo cheque la hora en mi reloj aun tenía casi una hora de sobra para poder recoger a Hinami, decidí recostarme por al menos veinte minutos, cuando los profesores se percataron que todo estaba en completo orden, Shizuka salió de la habitación dejando que descansará por lo sucedido.

Ascendientes del PorderDonde viven las historias. Descúbrelo ahora