From Hell To Heaven © (Editando)

✴El que busca Encuentra✴

CALUM

Un hombre vestido con un formal traje negro, supongo que un maestro, entra al salon acompañado de dos chicas que lo siguen de cerca, una de ellas alta, delgada, tiene el cabello rubio ondulado en las puntas y labios delgados de color rosa, la otra un poco más baja que la anterior, su cuerpo esbelto es atrayente para cualquiera y tiene el cabello castaño que recorre los costados de su rostro deteniéndose a mitad de sus pechos, sus labios carnosos pintados de un labial rojo se curvan en una pequeña sonrisa inocente cuando el profesor que nos daba la clase se acerca a ellos, hablan bajo la atenta mirada de todos los estudiantes que siguen cada uno de sus movimientos.

La voz del chico sentado a mi lado hace que me centre en sus palabras.

—¡no puede ser!, ¡pensé que se irían!—musita frustrado

—¿quienes son?—giré en el asiento llamando su atención.

—la escoria del colegio, Vale y Dany son la pesadilla de cualquiera.

Su aspecto, la reputación, el odio con la que el chico se refiere a ambas. Tengo que estar seguro.

— ¿Valeria Schmidt y Daniela Gale?—pregunte

Suspire resignado viéndolo asentir, desvíe mi mirada a Michael e inclinandome para que solo él escuche, le digo

—son ellas

DANY

Apenas llegamos al estacionamiento nos sentamos en el pavimento, justo entre los autos para evitar que algún profesor nos encontrara bebiendo. Conversamos de lo sucedido en los últimos días que no pudimos vernos, sin embargo recordé lo de esta mañana, entonces quise ser directa con Vale para estar segura a lo que atenerme éste año

—así que...—vacile—¿iras detrás de los chicos nuevos?

—lo haré

—¿crees que sea buena idea?

—nos ha funcionado ¿no?—le da un sorbo a su cerveza mientras asentí dándole la razón—¿tú?

La miré confusa

—¿yo que?

—¿te divertirás con el equipo de baloncesto?

Me dan ganas de salir corriendo en cuanto veo la sonrisa en su cara, sé que no lo sabe, pero sus palabras causan un pequeño dolor al recordar lo que sentí años atrás por el actual capitán del equipo.

Casi le doy una respuesta más Vale suelta un gruñido seguido de una maldición, me arrebata la cerveza de la mano y las lanza debajo de un auto.

—lo que faltaba—dice con fastidio.

Volteo mi rostro y sigo la dirección de su mirada, nos levantamos al mismo tiempo, sacudiendo mis jeans quité los restos de polvo y esperamos que el señor Kolend llegara.

Sus pasos se hacen más largos y firmes acercándose rápidamente, mostrando un semblante serio como lo caracteriza.

—deberían estar dentro del colegio—habló Kolend poniendo ambas manos en su cintura

—¿sabe qué? si, deberíamos, igual que usted—Vale avanza unos pasos, retandole.

—tuve una buena mañana, ignorare su falta de respeto y no las reportare con el director

—¡gracias! ¡que gran obra de caridad! —solté sarcástica—y me alegro que tuvo una buena mañana, porque la mía acaba de arruinarla porque ví su horrible cara!