✴Primer error : Dejarlo Entrar✴

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Me levanté de la cama escuchando mi celular, lo tomé de la mesita de noche y sonreí leyendo su mensaje.

*Te extraño *

Quise responderle con un " Yo también", pero mi parte defensiva prefirió guardarlo, entonces dejé el celular en su lugar.

Cualquiera que me conozca y me vea ruborizada por un mensaje creería que estoy loca, y puede que lo esté.

Hablar con Calum me ayuda a distraerme de mis problemas, no obstante todo se volvió un poco incómodo luego que tuvimos la cita, al menos asi fué para mí. Salimos un par de veces y lo obligue a llamarlo "salidas de amigos". Suena estúpido, aunque así no me siento tan extraña estando con él.

No tengo claro mis sentimientos, lo que si es claro es que el aprecio por él avanzó más rápido de lo que me hubiera gustado.

Miré los libros que están apilados en el suelo y suspire frustrada, acabo de terminar de estudiar el libro de literatura sólo falta el de quimica, matemáticas, español, filosofía y estadística, ¡¡Ag!! es demasiado.

Desearía dormir un rato en vez de estar despierta el resto de la noche estudiando para los exámenes que se aproximan. Mis ojos pesan del sueño, está semana Diego hizo que trabajará más tiempo de lo usual debido al aumento en las ventas de sus rivales, si antes dormía cuatro horas ahora sólo duermo una, eso me tiene exhausta.

Mi espalda estuvo a punto de tocar el colchón cuando suena el timbre.

¡Maldicion!.

Salí de mi habitación y bajé las escaleras arrastrando los pies, abriendo la puerta me sobresalte cuando gritó...

—¡sorpresa!—baja la caja de pizza que le cubría el rostro mostrando una sonrisa satisfactoria, le fascina asustarme pese a que le he dicho que lo odio.

—no recuerdo haberte invitado—mencioné de mala gana

Él ignora mi mal humor y con una de sus manos sujeta mi cintura moviendome para entrar a la casa, sube las escaleras y desaparece de mi vista, cerré la puerta y lo seguí, entrando en mi habitación lo encuentro sentado en mi cama con la caja de pizza abierta frente a él.

Levanté una de mis cejas esperando que me diga que hace aquí, si es inteligente y no quiere verme molesta, me lo dirá.

Suspira mientras toma una rebanada de pizza.

—quería verte—su sonrisa se borra de sus labios—necesitaba verte—añade cabizbajo

Una de las cosas que hemos aprendido uno del otro es que cuando necesitamos compañia no hace falta dar explicaciones, él y yo no somos la clase de personas que hablan libremente de lo que les pasa. Lo correcto sería preguntarle '¿estas bien? ¿que sucede?', en cambio me senté junto a él, tomé una rebanada de pizza y enciendo el televisor.

.....

Me desperté escuchando gritos, maldiciones y blasfemias que parecen venir de la calle, me levanté con cuidado tratando de no despertar a Calum y por curiosidad me acerqué a la ventana.

Frente a la casa la bestia se aleja tambaleando de un taxi, obviamente borracho, el chofer baja furioso del auto y lo persigue en la acera, logra tomarlo del brazo y la discusión se vuelve acalorada.

Una vocecita en mi cabeza dice que regrese a la cama sin embargo no pude evitar bajar las escaleras, cruzar la calle y llegar frente a ellos.

—¿algún problema?—sostuve a la bestia de los hombros cuando casi cae al pavimento.

From Hell To Heaven © (Editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora