From Hell To Heaven © (Editando)

✴¿"Victima"?✴

DANY

La calidez de sus labios contra los míos me provoca escalofríos asi mismo una sensación de incomodidad, esta parte del plan de Vale es estúpida, 'hacerles creer que estamos fuera de su alcance hará que su interés aumente', debería contradecirla pero eso daría paso a un debate de quien sabe más de chicos y yo saldría perdiendo.

Esa escena llamó la atención de cada estudiante y profesor que estaban en la cafetería, así que cuando todo finaliza cada quien regresa a lo que hacia antes.

Lewis siguió acariciando mi mejilla hasta que la mirada del pelirrojo y el castaño dejaron de estar sobre nosotras, de modo que cuando eso sucede alejé su tacto corriendo mi rostro.

—¡vuelves a hacerlo y te rompo la mano! —amenace limpiando los restos de baba que dejó en mi boca.

—tranquila—dice riendo—no es algo que quiera repetir, además...besas horrible.

—¡no es cierto!—reclame

—lo es—su risa incrementa y me lanza un guiño

Negué sin refutar sabiendo que lo que decía era mentira, nunca nadie se quejó de mis besos.

—¡paren!—ordena Andrew—es raro verlos coquetear.

—¡no estamos coqueteando!—decimos al unísono

—ya sé—sonríe—molestarlos es gracioso

Le lancé una pedazo de pan a Andrew que esquiva con agilidad, estoy por lanzarle otro cuando unas gotas de agua caen en mi cara.

—¡basta!—Vale deja la botella encima de la mesa—no me obliguen a lanzarles más agua igual que al gato de la señora Taunus—(un pequeño gatito color blanco que la visita por las noches, Vale lo odia porque se come sus galletas) —esta claro que Dany no sabe besar, pero...

Los chicos se ríen asistiendo.

—¡gracias!—fui sarcástica mostrándoles mi dedo medio.

—...lo importante es que el plan funcionó—continúa hablando—en unos días uno de ellos estará comiendo de mi mano.

—¿Calum o Michael?—indaga Andrew

Vale lo mira confusa, él sabe sus nombres cuando ella no y eso le molesta.

—¿cómo es que..?

—¿lo sabemos?—interrumpe Lewis—somos tus amigos y cuando alguien les interesa tenemos que investigar sobre él o ellos, en especial tratándose de completos desconocidos, durante la hora libre hicimos unas llamadas y listo.

Vale se acomoda en su asiento y dice con rapidez

—diganme todo.

Después de hacer un pequeño trato con Andrew sobre cuidar a Sofi una semana, Vale escucha atenta la información que le servirá para atraer la atención de las "nuevas victimas", como le decimos a sus conquistas.

—el moreno se llama Calum Hewitt, se mudó aquí hace dos meses, tiene 18 años, Paul un amigo que conocí en la fiesta de verano encontró una página de su anterior colegio, habia un articulo que decía que Hewitt era uno de los mejores jugadores de béisbol en su equipo escolar, los amigos que pude contactar lo describen como alguien tímido.

Alzando la mirada me encontré con esos ojos cafés, la comisura de sus labios se elevó en una sonrisa dándose cuenta de mi no tan discreta mirada, y pensé que de ninguna manera ese tal Calum podía ser tímido , del modo que se enfrentó a Lewis y Andrew estaría segura que es lo contrario.

—¿que pudiste averiguar del pelirrojo?—le pregunta a Andrew

—Michael Cright, demasiado extrovertido para tu gusto—se burló, más Vale lo ignora—tiene 19 años, tuvo que repetir un año en el colegio porque su familia viaja demasiado, es amigo de Calum desde lo cinco años y han sido inseparables desde entonces, tienes tu información, ¿a quien eliges?

—no estoy segura—Vale responde pensativa

El timbre sonó, Andrew y Lewis fueron a clases sabiendo que con Vale no tenemos intención de hacer algo el primer día.

Nos quedamos en el corredor sentadas frente a los casilleros bebiendo una botella de tequila que Vale le robó a su padre, que en el colegio las cámaras de seguridad no sirvan y que el vigilante del pasillo sea una profesora y esté de reposo por maternidad es una gran ventaja para beber sin que nadie nos moleste.

A punto de que la clase termine se me ocurre sacar a los chicos del salón, nos ponemos de pie y tiré la botella vacía en el primer bote de basura que encontramos.

Llegando al salón de literatura toqué la puerta.

—adelante—habló la señora Ramsey sin dejar de escribir en el pizarrón

Abrí la puerta, todos nos miran incluyendo la profesora.

—señorita Gale, llegan veinte minutos tarde—informa señalando el reloj en su muñeca—ahora entren y tomen asiento—hizo un gesto con su cabeza señalando la primera fila

—no podemos quedarnos—contesté de inmediato

—¿porque no?—se cruza de brazos

—El director quiere vernos

No tuve que darle detalles, sabe a que me refiero.

—¿que hicieron?—suspira—¿sabe?—niega con su cabeza—no quiero saberlo, así que Lloyd y Jhonson, vayan antes de que el director se moleste más.

Salimos del Colegio tranquilamente, lo único decepcionante es que engañar a los profesores se vuelve muy fácil.

La adrenalina de querer que te atrapen desaparece si los maestros son tan ilusos.

CALUM

Media hora dando vueltas en todo el edificio buscando el salón de literatura hasta que por fin lo encontramos. Cansado de caminar toqué la puerta y escuché un 'adelante', entrando le explique a la profesora que nos perdimos buscando el salón, ella contesta que no hay problema y que tomemos asiento.

Escribí lo que está en la pizarra, apenas unos minutos en clase y el timbre suena anunciando el final del día.

¿Valió la pena hacer ese inútil recorrido para llegar aquí?

¡No!.

Guardé rapidamente los libros en mi mochila para irme, pero la profesora nos retiene en el salón.

—antes que lo olvide, les daré un folleto con historias de diferentes géneros literarios para que redacten un resumen luego de leerlas..

Quejas no faltan, haciendo que la profesora ría de los holgazanes de sus alumnos.

—no se preocupen, para facilitarles el proceso lo harán en parejas.

Algunos suspiran aliviados, de seguro porque sus compañeros harán el trabajo por ellos. Otra vez se escuchan las quejas al oírla decir que ella las formará, en esta ocasión la profesora los ignora, tomando una hoja de su escritorio leyó los apellidos escritos en ésta, menciona algunos hasta dar con los nuestros.

—Cright y Gales, por último Hewitt y Schmidt como la señorita Gales y Schmidt no se encuentran ustedes tendrán que llevarse el folleto

Pone su mirada en nosotros y se acerca para darmelo.

—se pueden ir

Luego de decirlo todos salen corriendo del salón.

Caminamos perezosamente llegando al estacionamiento, nos subimos en las motocicletas y condujimos un par de kilómetros con dirección a los apartamentos a las afueras de Rouge Hill.

Lo primero que hice entrando a casa fué lanzarme en el sofá. Esté embrollo es más complicado de lo que pensé, no estoy seguro de como podemos comenzar con el maldito plan, el reloj corre.

"No será sencillo".

Esas fueron sus palabras y haré que se las trague una a una, si tenemos que pedir más tiempo para lograr el cometido así será, nadie nos ha dicho que no y ellas no serán las primeras.