Leí otra vez sus palabras,
recordé mi contestación.
¿Cómo olvidar si está escrito?
Maldita esa conversación.
Si no hubieran sido tantas
aún me perdonaría.
Repítese continua
cada vuelta de vida.
Indignos de ser amados,
de indiscutible imperfección,
Igual somos ellas y yo.
Solamente uno perfecto,
sólo uno siempre recto.
En Él, todo está correcto.
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Cantares del corazón
PuisiLo siento y lo escribo. Cuando me muera esto puede considerarse mi autobiografía emocional en verso.
