Un loco fin de semana

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Llegué a mi casa alrededor de las cinco y media, estaba muy cansada, a si que entre a mi habitación con mi maleta y mi mochila, saqué de ella a Toster y me dispuse a jugar con él, todo iba de maravilla, hasta que mi mamá entró.

-¿Qué estas haciendo Nora?, llevas toda la tarde encerrada en tu habitación.

-Sólo estoy con mi teléfono- mientras escondía a Toster detrás mío.

-Puedes salir por lo menos un rato de aqui, no te vemos en toda la semana, debemos pasar más rato como familia.

- Ya, bueno-salió y de inmediato escondí a Toster.

-Tienes que quedarte aquí hasta que yo vuelva, puedes recorrer toda mi habitación, pero si escuchas que alguien se acerca escondete de inmediato, aquí tienes comida y por allá esta tu caja de arena-le dije mientras le apuntaba los lugares.

-Te prometo que me portare bien.

-Adiós, cuídate y no hagas mucho ruido.

Me dirigí a la cocina a ayudarle a mi mamá a preparar la cena, después de comer fui a mi habitación a ver como estaba Toster, fue muy grande la sorpresa que me lleve al ver que estaba leyendo unos libros que tenía.

-¿Qué estas haciendo?-vi como se sobresalto.

-Me asustaste.

-Oye de donde sacaste ese libro.

-Estaba aburrido a si que me metí dentro de tú mochila y encontre el libro de historia, a si que comencé a leerlo, es muy trágico que les enseñen todas esas muertes que hubieron para poder conquistar america.

-A mi me aburre historia.

-¿Nora con quien estas conversando?...-me asuste mucho al oir gritar a mi papá, se me había olvidado que ellos no saben sobre esto.

-Estoy hablando con Annabeth por teléfono-fue lo primero que se me ocurrió.

-Oye Toster, te tengo que hacerte una pregunta, nosotras solo nos podemos teletransportar cuando alla una emergencia o también podemos ir a otros lugares.

-Ustedes pueden usar ese poder para ir donde quieran, siempre y cuando nos lleven en caso de emergencia.

-Se me acaba de ocurrir una muy brillante idea.

Tomé mi teléfono y llamé a Beth.

-Annabeth, tengo una muy buena idea.

-Dime que se te ocurrió.

-Le pregunte a Toster si solo nos podemos teletransportar cuando alguien este en peligro y me dijo que no era necesario,pero que los teniamos que llevar, a si que se me ocurrió que le digamos a los papás de Jane y a los mios que tú nos invitaste a tú casa a una pijamada y cuando ya estemos las tres nos teletransportamos a la fabulosa cuidad de Paris.

-Dime Nora. Podría tal vez.. decirle la verdad a mi mamá?- dijo un poco nerviosa.

-¡¿que?!,¿por qué?- le dije.

-Sabes que cosas como estas, mi mamá debe saber. Ademas la conoces bien como para saber que nos apoyará sin casi ninguna duda.¡¡Olle me encantó la idea, yo siempre quise que las tres fuéramos juntas a París!!

-Cuentale la idea a Jane y en un rato más te llamo para avisarte si me dieron permiso.

-Bueno-llamada finalizada. 

-¡¡Que genial Toster, iremos a París!!

-Calmate y baja la voz un poco o te escuchara y peor me encontrarán.

-¿Que tal si la mamá de Beth no nos apoya?

-Si nos va a apoyar, porque su mamá, confía en nosotras, ella sabe escuchar y se pone en nuestro lugar, como ella hay pocas.

Fui de inmediato a pedirles permiso a mis padres, los cuales después de minutos de suplica accedieron.

-Bueno, pero tienes que cuidarte mucho, y como a que hora te pasamos a buscar el domingo.

-Alrededor de las cinco de la tarde por que tengo que bañarme y hacer la maleta.

Llame a Beth para decirle la buena noticia.

-Beth, si me dieron permiso.

-Que bien, a Jane también, le conte todo a mi mamá y nos va a apoyar, se le ocurrió una mejor idea, que de verdad hagamos la pijamada en mi casa, ya que a mi mamá no le gusta que nos quedemos en lugares extraños, además no nos va a costar nada ir de un lugar a otro.

-Entonces ya todo esta dicho, nos juntaremos las tres en tú casa a las dos de la tarde mañana

Amistad, algo más que una palabraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora