Pasaban las semanas y alrededor de tres veces a la semana teníamos misiones, todo el mundo nos conocia. También Jun y yo conversábamos de vez en cuando, ya era dia sábado en la mañana, con la Camila acordamos que hoy día iríamos a París, pero le tuvimos que inventar una pequeña historia a nuestros papás, les dijimos que íbamos a ir al centro a comprar unas cosas y que volveriamos a las cinco en la micro, Camila y yo nos estabamos arreglando para ir, cuando ya terminamos salimos al camino de la casa, donde nadien nos viera.
-Listas-le dije.
-Si, pero que pasa si no funciona.
-Yo volvere de inmediato y... pasaremos el día en el centro, o sea que no le mentiriamos a nuestros papás, pero yo espero que funcione.
-Yo también.
-Pero para asegurarnos sería mejor teletransportamos tomadas de la mano.
-Si, muy buena idea.
Nos tomamos de la mano y nos teletransportamos a París, podía ver la torre Eifell ante mis ojos otra vez, pero tenía miedo de que Camila no estuviera al lado mio, hasta que senti como me apretaba la mano.
-¡¡¡Esa es la torre Eifell!!!-gritó y me alegre al ver que si se había podido teletransportar conmigo.
-No grites, no vez que todos nos estan mirando.
-Que vergüenza y por que nos miran como bichos raros.
-Lo que pasa es-respire ondo-uno hablamos español, dos fijate en su ropa es muy distinta a la nuestra y tres todavía no me sueltas la manos.
-A perdón-de inmediato me soltó la mano.
-Después de un rato te acostumbras a que te miren raro.
-Y como lo haremos por que yo no se hablar francés.
-Por eso con mayor razón tenía que traer a Toster, ya que él sabe hablar muchos idiomas y nos ayudara.
Comenzamos a recorrer lugares y la camila estaba tan emocionada que nada le podia sacar la sonrisa que tenía.
-Tienes que calmarte un poco, o si no va a ser la última vez que vas a venir-me miro un poco asustada.
-¿No?.
-Podemos venir cuando quieras, también podemos ir a cualquier parte del mundo-antes de darme cuenta ya me había abrasado.
-Muchas gracias Nora.
-Oye recuerda que solo venimos a comprar algunas casas pero yo creo que tú te trajiste toda la ropa de las tiendas.
-Y como lo vamos a hacer.
-Tengo una idea, nos teletransportamos adentro de tú habitación y escondes un poco de ropa debajo de la cama.
-Si suena bien, pero que pasa si hay alguien dentro de mi habitación o nos escuchan.
-Ojala que no, si llega a pasar eso, tendríamos que dar muchas explicaciones.
Luego de recorrer las partes más famosas de Paris, almorzar y Camila probarse mucha ropa, para luego comprarla, ya estabamos cansadas de caminar, decidimos llevar a cabo el plan, aparecimos en la habitación de la camila, por suerte la puerta estaba cerrada, pero el problema fue esconder todo.
-Trata de no meter ruido-dije en una voz tan baja para que solo ella me pudiera escuchar.
-Si lo se-justo después de decir eso accidentalmente Camila se tropieza con un zapato y al resfalarse votó una figura de vidrio, la cual se rompió.
-¿Que hiciste?
-Me resfale y lo vote.
-Nos tenemos que ir ahora mismo antes de que alguien venga-ella solo acintio con la cabeza tomó mi mano y nos fuimos.
-Eres un caso perdido, ¿como se te ocurre votar algo?
-Lo siento
-Ya bueno no importa, lo bueno es que no nos vieron.
Seguimos sacando fotos, tomamos un helado y nos fuimos a sentar a una plaza.
-Hoy fue muy divertidos gracias.
-Ahora ya se que puedo teletrasportar a más personas a donde yo quiera podemos ir a cualquier parte del mundo, cuando nuestros papás se enteren, podremos ir todos de vacaciones a donde se nos ocurra.
-Si sería genial, respecto a lo que dijiste, cuando piensas decirles.
-No lo se, probablemente luego-mire dicimuladamente mi teléfono y vi que eran las 04:55pm.
-¡¡Es tarde!!-grité y Camila se sobresalto.
-¿Qué hora es?
-Las cuatro cincuenta y cinco.
-Si es muy tarde-nos terminado el helado y como último nos sacamos una foto con la torre Eifell de fondo.
-Con las chiquillas hicimos lo mismo.
-¿Qué cosa?
-Sacarnos una foto con la torre Eifell de fondo, creo que sería bonito tener una foto especial con la parte más popular del país de fondo.
-Buena idea.
Nos teletransportamos a la entrada de el camino de nosotra casa, mientras avanzábamos me di cuenta de que no llevábamos ninguna bolsa.
-Oye Camila, no tienes ninguna bolsa¿que le vamos a decir?, se supone que íbamos a comprar.
-Que te parece decir que no encontramos lo que buscabamos y que pasamos la tarde en un pequeño "paseo de hermanas".
-Ok, me parece.
Entramos a la casa y por suerte no nos preguntaron nada al respecto, fui a la habitación de Camila para sacar mis cosas de debajo de su cama.
-Fue un día muy entretenido, ¿cierto?-dije
-Si, fue un viaje de hermanas-las dos reimos.
-Ya, me retiro-me fui de su habitación con las cosas que compré.
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Amistad, algo más que una palabra
Dla nastolatkówUn día de campamento tres amigas deben tomar una de las decisiones más impontantes de sus vidas, la cual les cambiara su futuro para siempre. A lo largo de la historia van encontrando el amor y juntas podrán enfrentar las situaciones que se les pres...