Como la luna

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Un golpe en la ventana de al lado de mi cama me despierta de un profundo sueño.

Al oírlo me levanto despacio tratando de no hacer ni el más mínimo ruido mientras me dirijo temerosa y curiosamente hacia donde fue emitido ese golpe ensordecedor. 

Los golpes siguen y son cada vez más fuertes.

Me asomo por el marco de la ventana tratando de no ser descubierta por lo que sea que haya ahí afuera. Logro ver claramente una silueta oscura con el reflejo de la luz de la luna alumbrando apenas la mitad  su rostro, su silueta se nota que es claramente la de una chica de pie y tranquila.

Una especie de tranquilidad me  cubre al notar una especie de familiaridad en sus ojos. Voy rumbo a prender la luz y para mi sorpresa la chica que se encontraba ahí afuera es Emma.

-¿Vas a abrir o me vas a dejar aquí muriendo de frío mientras me miras con cara de susto? -me dice en tono burlón.

-No esperaba que te me aparecieras de madrugada aquí, ni siquiera sé como conseguiste mi dirección.

-Yo tengo mis contactos-respondió entre risas.

-Ah, y por cierto, ¿que haces aquí? 

-Vine por si querías salir..

-¿A esta hora? ¿Acaso no tienes noción del tiempo? 

-Son las 3am, no seas exagerada.

-Esta bien, vamos antes de que me arrepienta.-le dije.

Las dos salimos por la ventana y yo seguí su paso hasta que ella se detuvo en un banco de una plaza cercana. Emma se sentó y se quedó mirando hacia arriba, a la luna.

-¿Es hermosa no? -dijo casi en un susurro.

-Sí..-le afirmé mientras me sentaba a su lado dirigiendo la vista a aquella luna tan brillosa.

-Casi como tú.-volteó la cabeza y nuestro rostro quedó a tan solo unos centímetros de distancia.

La miré fijo a los ojos y luego bajé la mirada a sus labios, ella sonrió.

-Para serte franca te traje hasta aquí para decirte que me gustas mucho Daphne, de seguro lo sabes porque leíste mi diario.

-Sí, lo sé.

-......¿No vas a decirme nada?-susurró.

-Con esto bastará.-le dije y la besé.

La besé como si no hubiese un mañana, cómo una persona que está frente al amor de su vida, cómo alguien que ama por primera vez, cómo si no importase nada más que nosotras.

-Cada página que leía me hacía querer estar junto a ti, me enamoré de ti y quiero que estemos juntas.

Me tomó de la mano.

-Juntas por siempre.-sonrió.

-Por siempre..

Permanecimos ahí sentadas, juntas, bajo la luna apreciando su sinigual belleza y resplandor.


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⏰ Última actualización: Jul 08, 2016 ⏰

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