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Estaba tan cerca que casi podía tocarla, que podía sentirla. A escaso 200 metros de la meta. Había dejado a todos ya muy atrás. Pedaleaba con fuerza y a la vez tranquilidad. Todo le había resultado tan fácil, una carrera menor a las que él había enfrentado, quizá por eso se le veía tan confiado de la victoria. Esto era casi un entrenamiento mas. Una demostración de su gran potencial. Pero como en aquella vieja fábula para niños su confianza fue su perdición.

Sin saber cómo, ni en qué momento otro competidor paso a su lado a toda velocidad, lo superó en menos de un segundo y le arrebató la victoria dejándolo en shock y sin poder creerlo.

Lo habían vencido, a él un competidor de primera línea, un ciclista profesional participante en certámenes nacionales e internacionales. Esto era una humillación, un insulto. Esto no podía quedarse así, tenia que conocer a la persona que lo dejo como un tonto. Pero de manera muy extraña el competidor había desaparecido.

Por mas que lo buscó y buscó no lo encontró por ningún lado. Se resignó y después de recibir su medalla por segundo lugar regreso furioso a su casa.

The Finish Line |Historia corta|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora