6. Me, myself and I

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Todo pareciera indicar que habíamos dejado muy atrás a el Ejército de Alicia. El sonido de las espadas había dejado de sonar. Ahora sólo esperaba que Lirón y La Liebre se encontraran a salvo.

—Tyson, tenemos que descansar un poco, hemos estado caminando sin parar.

—Lo sé Megan, pero seguimos en el Bosque Turgal y no hemos visto ni siquiera una pista sobre el Laberinto o el Castillo.

—¿Podemos descansar un poco? No sé cuanto tiempo llevamos así. El hecho de que siempre está soleado me causa estrés y mi cuerpo no se adapta.

—Está bien, pero hay que buscar un lugar seguro. Lejos de la vista del Jabberwocky.

—¿Qué te parece un árbol?

—Suena bien, lejos del suelo donde el Ejército nos pudiera encontrar y con las hojas podremos escondernos del Jabberwocky.

Y puede que vea si vamos en la dirección correcta...Pensé.

—Ese árbol se ve grande Tyson.

Megan señaló un árbol a nuestra izquierda. Parecía un roble antiguo, con hojas largas colgando de las ramas y hojas tan grandes como un perro en la copa.

Ayudé a mi hermana a subir por el tronco. Y luego me impulsé a mi mismo.

Seguimos escalando hasta estar lo suficientemente arriba para salir de la vista de cualquiera.

—Duerme Meg.

—¿Y tú?

—Alguien tiene que hacer guardia. Además, no estoy cansado.

Megan intentó acomodarse en la rama y cerró los ojos.

¿Maravillas? ¿En verdad todo esto estaba pasando? No podía creer que los cuentos de hadas fueran reales. La vida me había enseñado a crecer olvidando ese tipo de ilusiones. La vida era simple, tenía un orden.

Pero ahora estaba consciente de que la Magia existía. Tal vez no al estilo Harry Potter, pero era algo real, algo que podía ver y sentir en este lugar.

"Maravillas". Ahora entiendo el nombre. Este lugar es fantástico, todo es lo contrario a lo que conocemos. Hay animales que hablan, dragones y criaturas increíbles, había magia en este lugar. La magia era palpable, respirable. Tal vez por eso los humanos se volvían locos al estar aquí.

Y puede que ahora entendiera el deseo insaciable de Alicia por volver. Una vez que sabes que la magia existía no podías volver a la realidad. Todo carecía de importancia.

"¿Filosofando?" Una voz llenó mi cabeza.

—¿Cheshire?

"No esta vez"

—¿Quién eres?

"Nadie que merezca ser nombrado, no al menos ahora."

—¿Dónde estás?

"Siempre me has ignorado. Hasta hoy"

Giré la mirada en todas direcciones, no había nadie a mi alrededor y Megan estaba profundamente dormida.

"Estoy dentro de ti Tyson, es inútil que me busques"

—Si estás dentro de mi, ¿Cómo es que nunca te había escuchado?

"Ya lo dije muchacho, todo este tiempo me has ignorado. Te has negado a escucharme"

—Muéstrate.

"Si eso es lo que deseas..."

Giré la mirada hacia el suelo y ahí estaba. El autor de la voz de mi cabeza. Era...yo.

Me encontraba parado en el suelo bajo el árbol. Era como ver un espejo, era idéntico a mi. El mismo corte desalineado de cabello, los mismos jeans rotos, los converse azules la playera azul turquesa y la chamarra negra.

Beyond WonderlandDonde viven las historias. Descúbrelo ahora