— ¿Aceptarías salir conmigo si te invito a tomar algo?
—Pe...
Luhan le cubrió la boca con su dedo.
—Debes aceptar—ordenó intentado lucir severo—quiero que seamos amigos, déjame ser amable.
Minseok vio la expresión molesta en el rostro de Luhan no pudiendo evitar reír. finalmente, terminó por aceptar sellando el acuerdo con un saludo que Luhan le obligó a aprender y de pronto Minseok ya no estaba solo, había conseguido un amigo, uno de verdad.
*****
Durante la semana, Minseok siguió acercándose a Luhan, pasaban los descansos y almuerzos juntos conversando y conociéndose. Luhan le hizo cumplir el acuerdo que ambos habían hecho y el fin de semana fueron por bubble tea al centro comercial.
Minseok toda su vida había salido en compañía de sus padres por lo que ahora con Luhan, todo parecía nuevo y mucho más divertido, bueno, Luhan era divertido, le hacía reír y sonreír mucho, además, el chico parecía gustar del contacto físico, siempre le estaba abrazando, apretando sus mejillas o desordenándole el cabello como muestra de afecto y aunque Minseok seguía siendo demasiado tímido como para atreverse a hacer lo mismo, pensaba que después de todo, podría acostumbrarse a esto de la "amistad".
JongDae por su parte, pasó la semana intentando evitar a Minseok en la escuela. Cada vez que le veía un sentimiento de incomodidad y culpa aparecía en su pecho haciéndole sentir realmente mal, pero aunque tratase a toda costa de no encontrarse con él, inconscientemente se vio buscándole día a día sólo para asegurarse de que estuviera bien y al menos poder escucharle hablar, porque la voz de Minseok era suave y bonita, o eso pensaba JongDae.
Una tarde luego de la escuela, cuando JongDae caminaba de vuelta a casa, le vio correr calle abajo con la mochila bien cargada. Por un momento pensó en seguirle porque todo lo que involucraba a Minseok le daba curiosidad, pero enseguida recordó todos los problemas mentales que el chico le estaba trayendo y optó por no involucrarse más con él.
Y así los días siguieron pasando, JongDae siguió topándose con Minseok yendo por el mismo camino que la primera vez con la mochila igual de cargada y como siempre, llevando prisa para llegar a quien sabe dónde. Hubo veces en las que Minseok también le vio pero cuando sus miradas se cruzaban, corría el rostro y se apresuraba en alejar dando a entender a JongDae que al igual que él, Minseok se sentía incómodo con su presencia.
Pero luego de dos semanas esquivándose y haciendo como si el otro no existiera, se dio la oportunidad de volver hablar.
JongDae regresaba de clases luego de haber acabado el taller de música. Era miércoles, único día en el que no veía a Minseok después del colegio ya que el taller duraba dos horas y para ese entonces cuando él salía, el muchacho de mejillas regordetas debía estar en su casa descansando, haciendo algún trabajo o simplemente viendo algo en la televisión. JongDae iba a acortar camino a través de los pequeños callejones que estaban cerca del colegio, después de todo, hoy no vería a Minseok así que irse por la calle principal no valía la pena.
Cuando iba a doblar para cambiar su recorrido, divisó una figura conocida, era Kris. Si hubiera visto al chico un mes atrás habría hecho caso omiso de él y habría seguido caminando pero en esa ocasión no, algo en su interior se removió y se vio obligado a acercar.
Yifan- nombre chino del grandote- estaba junto a dos de sus amigos y otro chico al cual estaban molestando. JongDae tuvo una desagradable sensación cuando reconoció el rostro de Minseok entre los presentes.
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Quiéreme tal como soy (CHENMIN)
FanfictionMinseok no es lo que podría llamarse " un chico popular", más bien, es todo lo contrario. Su casi inexistente vida escolar se basa en el bullying silencioso que sufre por parte de algunos compañeros debido a su sobrepeso y aspecto poco atractivo. P...