Viernes por la mañana, Minseok descansaba a un lado de Luhan luego de que el profesor de gimnasia abandonara la cancha.
— ¿Quieres ir a ducharte? —Luhan preguntó.
Minseok sacudió la cabeza como queriendo alejar todo el sueño que de pronto tenía, se limitó a asentir y enderezándose, cogió sus cosas del suelo para juntos caminar hacia los camarines.
— ¿Crees que podamos pasar antes por la cafetería? Tengo demasiada hambre y dudo que mi estómago aguante hasta el almuerzo.
Con pereza, accedió a la petición de Luhan siguiéndole de cerca mientras iba removiendo cosas dentro de su bolso.
—Lu Ge— le llamó.
Luhan dejó de avanzar volteando en su dirección. Entre sus manos, Minseok tenía un alfajor que muy amablemente le ofreció.
— ¿En serio me lo das? —preguntó queriendo asegurarse.
—Tómalo, de todas formas no pensaba comerlo.
Sin pensarlo demasiado, Luhan cogió el dulce devorándolo casi al instante, Minseok simplemente sonrió continuando su camino hacia el camarín.
—Ya es la cuarta vez que me regalas tu colación, ¿estás haciendo dieta? — bromeó Luhan, pero cuando la expresión de Minseok mostró nerviosismo, supuso que quizás estaba en lo cierto—Minnie, ¿de verdad estás a dieta?
— ¡No! —Minseok exclamó inquieto—yo...bueno, sólo intento dejar los dulces—confesó—Omoni todos los días me da de los pasteles que vende en la cafetería. Si los rechazo, probablemente se sienta mal.
—Y todo eso dificulta tus intentos por bajar de peso, ¿o no?
Minseok asintió.
—Hace un tiempo realmente no me importaba lo que otros pensaran de mí, estaba a gusto conmigo mismo, me sentía bien. Pero últimamente...cuando me miró en el espejo, no me gusta lo que veo y es frustrante. ¡Duele, Lu Ge! No sé qué hacer—sollozó.
El pecho de Luhan dolió, le angustiaba ver a Minseok sufrir. Con delicadeza rodeó su cuerpo y lo atrajo hacia un abrazo cálido y protector. Esperó a que el chico se calmara y luego apartándose sólo unos centímetros, le ayudó a secar sus lágrimas brindándole una bonita sonrisa que en seguida Minseok correspondió.
—Minnie, está bien querer estar a gusto con uno mismo pero quizás estás haciendo las cosas mal. Si evitar los dulces no te hace feliz deberías buscar otra solución—le aconsejó.
Minseok volvió a asentir como niño a quien sus padres regañan.
— ¿Pero qué otra cosa puedo hacer?
Luhan frunció el ceño pensando, alguna idea debía ocurrírsele para ayudar a su amigo. De pronto recordó el club de fútbol al que se unió la semana pasada, quizás si Minseok se unía podrían ejercitar juntos. Sin darse cuenta, comenzó a sonreír de formar perturbadora haciendo que algunos estudiantes le quedaran viendo con extrañeza.
—Ummm...Lu Ge—llamó Minseok.
Luhan volvió a prestar atención en él, causándole un susto al momento de agarrarle por los hombros para acercarlo a su rostro.
—Tengo una idea, Minnie—susurró.
Bien...Minseok podría irse preparando para cualquier cosa.
*****
Cuando JongDae terminó sus clases, cogió sus cosas lo más rápido que pudo y salió de la sala sin siquiera despedirse de Sehun y Jongin.
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Quiéreme tal como soy (CHENMIN)
FanfictionMinseok no es lo que podría llamarse " un chico popular", más bien, es todo lo contrario. Su casi inexistente vida escolar se basa en el bullying silencioso que sufre por parte de algunos compañeros debido a su sobrepeso y aspecto poco atractivo. P...