Se. Baekhyun

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Contemplar a Chanyeol desde mi asiento se convirtió en un hábito. Su altura no pasaba desapercibida, y eso me gustaba en demasía.

Mis mañanas se redujeron a él. Un gigante de metro noventa, con orejas de elefante. Torpe pero muy amable, me pregunto el por qué es tan bueno conmigo por sobre los demás.

"A: Le gustas, B: quiere sexo contigo y C: sólo es algo pasajero, Byun." Los consejos de Luhan no son del todo buenos.

Chasqueé la lengua antes de irme y dejar a un Luhan riéndose de mi. ¡Bah! Él puede tener a una estrella porno como novio... ¡¿Y yo?! Ese poste me había llamado la atención, y no iba a dejar que alguien más me lo quitara.

Caminé fuera de la escuela, procurando avisarle a mamá y a mi hermano que llegaría un poco más tarde de la hora normal.

Caminé y caminé, para finalmente detenerme en un parque que yo conocía bastante bien. Puede decirse que no es una historia muy feliz, pero de alguna forma me hace sentir... ¿Bien?

Tenía unos, seis o siete años para ese entonces. Escuchaba y era un niño común y corriente. Comía mis vegetales, bebía mi leche a las horas, hacía mis tareas de la escuela, era bueno con mi hermano menor e incluso había comenzado en el club de "Arte Musical" en la escuela primaria, siendo parte del coro de esta.

Mamá estaba muy orgullosa, pero en su rostro podía notar el cansancio y una gran tristeza, que para ese entonces no comprendía de dónde venía.

Entonces mi madre nos llamó a la cocina de nuestra casa, porque tenía una "Especialmente Grandiosa Idea" para el día del padre.

... ¿Han notado que no hablo de él?...

Mamá nos tomó nuestras manitos, y comenzó a caminar por el barrio, hasta detenerse en el mismo parque. Allí, un hombre alto y bien parecido estaba sentado en una banca con un bello ramo de flores.

Tenía siete años y supuse que era mi papá... Pero resulta que Byun Jeong Ho, no era aquel hombre con buena ética. Ese hombre era Alex Kim...

... Padre de mi hermano menor...

—Tae, hijo, mira... —Mi madre apuntó hacia aquel hombre que sonreía fascinado, viendo a mi pequeño hermano parado frente a él... Ignorándome a mí. —Él es tu papi...

Se abrazaron... Y yo quedé fuera, no se lo tomen mal, pues era su familia después de todo.

Yo era un niño sensible, y a la vez muy ingenuo para algunas cosas. Me acerqué lentamente y abracé la pierna de aquel hombre, que la verdad... No tenía nada de similar con mi padre biológico.

Pero, ¡hey! Tenía siete años, y mi hermano estaba abrazando a su padre... Mi lógica era: "Taehyung es mi hermano, él abraza a su papá... Entonces también es mi papá."

Desde entonces tengo dos padres... Uno en Corea y el otro en quién sabe dónde.

Es extraño, pues nunca le he dicho a Alex "papá", para mi es el hombre que me crió, regañó, trabajó para que yo tuviera unos estudios, pago mí sordera... Pero no era mi padre.

En cambio, Taehyung siempre lo llamó de aquella forma, y en cierto modo, es extraño no poder compartir a ese maravilloso hombre.

Me senté en aquella banca y cerré mis ojos para sentir el viento rozar mi cara. Me concentré, pues si tenía suerte –o la capacidad aún– podría escuchar tal vez el ruido de los autos al pasar... O una escandalosa risa.

Incluso podría escuchar un poco las voces de las personas si me mantenía casi en estado de nirvana. Claro, se escuchaban como cuando hablas bajo el agua... Asquerosamente mal.

Si me pongo a pensar, he olvidado básicamente todas las voces que alguna vez escuché. Incluso la de mi madre y mi hermano menor.

Tampoco es que haya sido muy sociable en mis días de escuela... Tenía muy pocos amigos, y con el único que he congeniado de maravilla, es con Luhan.

Es tan igual a mi y a la vez tan distinto.

Abrí mis ojos lentamente. Mi vista se posó en un grupo de personas que debían cruzar la calle... Pero se me cayó el alma al ver a un chico cruzando aún cuando no había luz verde.

Un autobús venía a toda velocidad, y no se si ese chico lo hacía a propósito pero no avanzaba.

Mi corazón comenzó a latir, provocando que mi pecho se contrajera en un impulso. Comencé a correr en dirección al chico, y gracias al parecido de nuestro tamaño pude sacarlo del camino llevándolo conmigo hasta el parque...

... Fue entonces que entendí...

Ver sus expresiones me pusieron los pelos de punta, porque comenzó a buscar algo en el suelo... Sin fijar la vista en ninguna parte.

Tosí un poco y el chico hizo algo como si supiera que estaba allí... Sin verme.

Suspiré y luego tome aire nuevamente. —¿E-Eres cigo ? —Articulé con dificultad.

Seré claro, puedo hablar y se hacerlo... Pero si no me escucho, es mucho más difícil.

El chico sonrió timidamente sin mantener contacto visual y asintió lentamente.

Suspiré un poco y lo observe un poco. Era muy lindo, bajito, cabello negro con un brillo bastante peculiar, labios gruesos y un tanto acorazonados y luego sus inexpresivos ojos color avellana... Grandes e inútiles.

—¿Cómo te iamas ?

Él habló. Escuché lo mismo que expliqué antes: al chico hablando como si estuviera bajo del agua.

Me sentía mal... Muy inútil, pero al leer sus labios esperé no haberme equivocado.

—Do Iunsoo... —Dije y él asintió. —Soy sordo... Lo iento...

Él sólo sonrío y ladeó su cabeza, pronunciado un "¿y cuál es tu nombre?" Que pude leer.

—Byun Baekhyun... Un usto. —Sonreí.

Entonces entendí una cosa que hace bastante me tenía incómodo.

Mi discapacidad no me hace peor, como dicen los mal hablados, y tampoco me hace mejor, como pintan los putos comerciales de hospitales inservibles.

Mi sordera no era nada de eso... Y tampoco era un castigo por alguna acción que hice en mi vida anterior o algo así. No, claro que no.

El que no pudiera escuchar era tan solo... Otra prueba.

Dicen que el universo sólo les da problemas realmente grandes, a gente realmente fuerte... Entonces... ¡Yo soy un súper humano!

Kyungsoo también... Y Luhan, y todos son súper humanos cuando se relacionan con algún problema... ¿No es así?

Si lo dudas, no importa... Te haré cambiar de opinión...

Continuará...

Sweet Breath  *ChanBaek*Donde viven las historias. Descúbrelo ahora