-Que porquería es el amor.
Dijo mientras le daba una última calada al cigarro y lo tiraba al suelo.
+Lo es, pero no te parece que tiene algo de magia?
-Y una mierda de magia- se reía. Agarró la botella de vodka y le dió un largo sorbo.
+Sabes? Empece a meterme en estos vicios por una persona.
- Me dijeron que...me dijeron que nunca hay que dejarse destruir tanto por una persona. Aunque creo que con el hecho de solo darle demasiada importancia ya le das el derecho de hacer la regalada gana contigo- le dijo a su compañera.
+ Y tú?¿Qué pasó?
-Lo de siempre, chicos- dijo. Sacó el último cigarro y una lapicera del bolsillo.
+¿Qué estas haciendo?
-Lo mismo que hizo él- sonrió. Anotó el nombre y luego le dió un beso. Así el cigarro quedo marcado y manchado de algo de labial.
+Vamos nena, enciéndelo de una vez- alentó a su amiga.
Agarró el mechero y lo encendió.
-Con que así se sentía eh?
El nombre se fue consumiendo de a poco. Como ella, poco a poco hasta quedar en nada.
La última calada la disfruto más.
+Creo que ya es hora que nos vayamos- le avisó. Nunca mediaron palabras en estos 15 minutos. El silencio reino entre ellas dos.
-Como digas-miró la colilla, la tiró y la pisó.
Se marcharon juntas, después de todo la noche recién empezaba.
Ella tenía la esperanza de que al igual que el humo del cigarro, sus recuerdos se desvanezcan y se los lleve el viento.
Ana 🔱
