—¡Ah! —chilló Ashley en un grito prolongado.
—¿¡Qué pasa!? —preguntó preocupada Emma.
—¡Dios mío! ¡Es él! ¡Ah! .—Otro chillido.
—¿¡Quién dónde?! —volvió a preguntar.
—¡Jeremy Sumpter! ¡Ah! ¡Es tan guapo! —dijo, señalando a la pantalla de televisión del vecino de en frente donde estaban poniendo "Peter Pan la gran aventura".
—No lo entiendo, desde que ese actor hizo esta peli, todas estáis locas por él ¿Por qué? Solo es un chico —dijo Emma restándole importancia.
—¿¡Por qué!? ¡Por Dios Emma, es guapo, listo, valiente...! —explicó con voz ensoñadora.
—Un personaje—interrumpió la chica.
—¿¡No entiendes que es supermono!? ¡Vuela, es romántico, guapo, valiente...! —siguió diciendo con esa voz de adolescente atontada.
—¿Estás hablando de Peter o de Jeremy? —preguntó Emma desconcertada.
—De Peter, interpretado por Jeremy —respondió la adolescente entusiasmada.
Emma puso los ojos en blanco, sintiéndose confusa.
« ¡Dios mío! ¿¡Qué demonios tiene ese chico!? ¿Es guapo? Sí, no voy a mentir pero ¿y qué? Hay muchos chicos guapos en el mundo y ni que ser guapo o interpretar un papel fuera lo más importante» pensó la chica.
Emma Hart tenía doce años. Con la piel blanca como la nieve y los ojos claros, su cara reflejaba el frío del invierno, pero todo eso se contrastaba con su melena castaño-rojiza que le daba un mejor equilibrio a los colores. Vivía en una escuela interna. Sus padres murieron cuando ella tenía siete años y cada día que se levantaba pensaba en ellos. Como no había sitio entre las niñas la habían puesto en la segunda planta de este horrible edificio gris con las adolescentes. Su compañera de cuarto, Ashley, tenía quince años y ella y todas las chicas de aquella planta estaban obsesionadas con los chicos, especialmente con Jeremy Sumpter. Emma no lo entendía; decían que ya le llegaría la pubertad y la adolescencia. Ella no sabía muy bien qué era eso, pero si significa hacerse las tontas delante de los muchachos, de arreglarse y seguir las modas, y de actuar como una estúpida sin personalidad, prefería que no le llegase. Además se quejaban por todo, por una espinilla, por una uña rota, por su pelo, sus ojos... « ¡Cómo si no hubiera problemas mayores en la vida! Sí definitivamente la idea de la adolescencia no me atrae» pensaba Emma. Aunque en realidad les tenía envidia, porque si ellas se preocupaban por cosas tan insignificantes era porque tenían las cosas más importantes, como una familia.
«Me gustaría ser como Peter Pan, el de verdad, pero sólo para no crecer jamás. A diferencia de mis compañeras yo me leí el libro de JM Barrie ¡Me fascina! Aunque no coincido con la última frase del escrito "Y así serán las cosas, mientras los niños sean alegres, inocentes e insensibles" Yo creo sí tienen alegría e inocencia, pero no me creo que sean insensibles, sí que tienen sentimientos. Eso fue lo único que no me gustó, que hiciera ver hasta a Peter como un insensible sin escrúpulos, y que si los demás niños perdidos no le hacían caso él les pegaba, sobre todo cuando jugaban, porque Pan quería que fueran niños eternamente».
Otra cosa que no sabían sus compañeras es que sí es verdad que Wendy estaba enamorada de Peter, pero él no de ella. Y el beso que creen que fue entre estos dos niños, en realidad fue el de la madre de Wendy. La mujer tenía un beso que nadie le había logrado sacar, ni si quiera su esposo, porque en realidad era un beso maternal para Peter Pan. ¡Y todavía las chicas creían que este niño es un romántico! Si hay algo que no tiene es eso mismo. Y en cuanto a Jeremy Sumpter, le parecía un actor más del montón. Sí es cierto que encarnaba bien en apariencia física a Peter Pan, pero bueno, en su opinión, si ya no fueron fieles a la historia, lo mínimo que podrían hacer era eso.
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Peter Pan y el Corazón del León #Worlds2018
FanfictionEmma Hart, una huérfana de doce años que se ve obligada a hacer tratos con adultos despreciables para que no la manden a un orfanato. Sin embargo, todo cambia cuando Peter Pan y Campanilla entran por su ventana. Su vida se convertirá en una aventura...