THE RUN AND GO• joshler

CINCO

Tyler despertó de un salto luego de haber visto a josh en sus sueños, el sol pegaba en su cara obstruyendo su vista, la gente caminaba frente a él ignorándolo. Lentamente Tyler se levanto del piso con dificultad, su espalda dolía y su cabeza también.

Comenzó a caminar sin saber en qué dirección, el solo quería llegar a su casa y poder seguir viviendo tranquilo.

El chico caminaba pensativo, acordándose de Josh. Tyler nunca entendió porque Josh nunca lo fue a visitar al manicomio y ahora él no entiende porque su familia no lo fue a buscar, Tyler trataba de recordar su vida antes de que entrar al manicomio pero el chico no recordaba nada, era imposible para el tratar de recordar algo. Por ahora él solo quería volver a casa.

El chico tenía sus manos en sus bolsillos y miraba al piso asustado y desorientado, de vez en cuando alzaba la vista para ver en dónde estaba, por suerte había logrado salir de ese lugar escalofriante... Ahora estaba en un pequeño barrio, casas medianas, árboles en cada una ellas acompañadas de un perfecto césped. A Tyler el lugar le parecía familiar. Le parecería familiar esa ancha calle por donde estaba caminado, miraba las casas que estaban pintadas con claros colores que avivaban el barrio.

Tyler pasó por al lado de unos niños que jugaban. rápidamente los niños lo miraron con miedo, Tyler trataba de sonreírles pero solo mostró espanto al igual que ellos.

Los niños entraron corriendo a sus respectivas casas, Tyler siguió caminado por el lugar. —¿Qué hice? – se preguntaba a sí mismo.

El lugar parecía alegre, eso creía Tyler cuando llegó casi al final del camino topándose con una casa, escalofriante en donde nadie habitaba. Había una cinta que rodeaba la casa color amarilla con letras negras -Prohibido el paso -. Era lo que decía esa cinta.

"¿qué es todo esto" pensó Tyler, contemplando la casa.

Esa casa podía verse escalofriante, era grande... Desolada pero para su mala suerte a Tyler se le hacía familiar.