Capitulo 4: El amor de mi vida

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Espero que les guste y voten. Es un pequeño regalo, un capítulo narrado por Peeta. Visiten la historia de One Shot de Peeta y Katniss. :)

Peeta.

Desde pequeño me criaron para llevar al mando la panadería, Mellark. Por generaciones mi familia ha sido dueña de ese lugar. La mejor panadería del distrito y hasta puedo decir que una de las mejores panaderías de todo Panem. Mi mejor amiga de la infancia y de toda la vida fue y seguirá siendo Delly. Nos conocemos desde que estuvimos en pañales, mi madre conforme pasaba el tiempo y crecía me quizo emparejar con Delly, pero ella y yo jamás nos llegaríamos amar, nos queremos como hermanos, pero amor de pareja es muy fuerte.

Desde pequeño tuve que ser disciplinado, mi madre me trataba siempre con dureza. En cambio mi padre, con amor. Mi padre y yo siempre tuvimos una conexión especial. Un lazo que nos unía, parte de sanguíneo, la panadería. Cada vez que salía de la escuela iba directo a la panadería y ayudaba a ser panes sin levadura a mi padre.

"Cocinar es un arte, Peeta. No lo desaproveches". Eso siempre me decía.

Al entrar a la adolescencia las hormonas hicieron lo suyo en mi. Crecí. Cambié como todo niño al crecer, deje mi inocencia y juegos atrás, y di la bienvenida a un nuevo mundo.

Una gran amiga de mi madre, tenía una sobrina. Johana Mason, ella tenía 19 años cuando la conocí, yo apenas tenía 15. Una noche de las muchas que se quedó a dormir en mi casa se metió a mi cuarto mientras dormía y no precisamente para dormir. Yo no era ajeno al tema del sexo, sabía todo de lo que se trataba y de lo que se debería de hacer, pero a esa edad nunca había tenido una relación sexual hasta esa noche. Estaba durmiendo cuando sentí unas manos en mi espalda, al virarme la vi. A Johana, la hija de la amiga de mi madre. Alta, castaña y guapa. En el esplendor de la juventud. Esa noche me dijo que la complazca y aunque al comienzo no sabía lo que hacia traté de hacer lo mejor. Esa fue mi primera vez. Ahí conocí por primera vez el cuerpo desnudo de una mujer y ahí por primera vez alguien conoció el mío desnudo que no sea mis padres cuando era pequeño. Desde aquella noche inicié mi vida sexual. Ella estuvo dos semanas más en mi casa, en mi cama, hasta que se fue con su madre de regreso a su distrito. Tiempo después supe que se casó, jamás la volví a ver. Cuando ya tenía 17 años seguía con mis responsabilidades en el colegio y en la panadería, pero en las noches daba rienda sueltas a mis necesidades. Iba a la casa de mis novias, me metía a sus cuarto para tener sexo. Toda mi adolescencia fue un experimento del nuevo mundo de placer.

Siempre cuidé a Delly de los chicos que querían meterse entre sus sabanas. Cuando ella tenía ya quince y yo dieciocho ella quiso comenzar a experimentar el sexo, le dije que era muy joven. Y lo era, para ser mujer. No es que fuera machista, pero los hombres no perdemos nada al tener sexo, las mujeres pierden mucho. La aconsejé que lo haga con el chico idóneo, por amor. Pero como siempre no me escuchó y una noche que fue a una fiesta, perdió la virginidad con el hijo del boticario del distrito. No me gusto, ella era como mi hermana, es mi hermanita y lo hizo con un cualquiera del distrito, no es que yo fuera la santa paloma, pero había mejores chicos atrás de ella y ella escoge al peor.

Y así pasaron los años, entre la panadería y los estudios, mis padres, Delly y las mujeres que calentaban mi cama.

Una noche, exactamente a mis 27 años, mi madre andaba histérica porque aún no sentaba cabeza y me casaba. Y aunque ella no lo decía con exactitud, tenía que hacerlo con Delly, la hija del alcalde del distrito. Delly lo sabía y tampoco estaba de acuerdo, no nos amábamos.

La Enfermera-TERMINADODonde viven las historias. Descúbrelo ahora