2: La llamada

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Cuando desperté eran las 6:34 p.m. Me puse de pie y me mire en el espejo un largo rato, como yo un niño de 14 años podría tener claustrofobia y vivir atrapado entre mis pensamientos, lo peor aun era que no podía estar entre tanta gente.
No podía hablar con personas, no importa si fueran conocidos o personas nuevas, me sentía inseguro, me preocupaba lo que pensaran de mi.

En la escuela solo tenía dos amigos: Kimberly y Carlos, ellos eran los únicos en que podía confiar , a Kimberly la había conocido en primer grado de Secundaria fue la primera persona que conocí el primer día de clases y Carlos ya lo había conocido hace varios años atrás, cuando yo vivía a tres casas de la de el, y nos hicimos muy buenos amigos.

Cuando termine de ver mi cara en el espejo escuche un sonido como el de un teléfono, y vi que era el mio, algo extraño por que casi nadie me hablaba, me apresure a contestar la llamada.

-Hola?

-Hola, soy Kimberly , quería saber si iras a la fiesta de Paulina después de clases?

-No, no iré, no me invito

-No importa, a la mayoría no invito pero irán y además Paulina dijo que la invitación era en general.

-Kimberly, la verdad es que no quiero ir, siento que no encajo con los demás...y no quiero ver al estúpido de Cristopher, no lo soporto, no soportó sus burlas y sabes que no puedo estar entre tanta gente por mi claustrofobia.

-Vamos, va ser divertido ir solo un momento y además te sirve para distraerte un rato...

-Esta bien, iré pero solo por ti y solo estaré un rato.

-Y con lo de Cristopher, el es imbécil no le hagas caso, bueno, ¿paso por ti a las 5:00 p.m. ?

-Si a esa hora esta bien.

-Bueno, adiós, nos vemos mañana...

-Adiós.

Deje el teléfono en la cama y me recoste un momento, lo que mas me gustaba de mi habitación era el enorme árbol que esta afuera de mi habitación, aun lado de mi ventana, y me quede observando lo hermoso que era.

Me bañe y me puse mi pijama de rayas color azul celeste y azul marino que por cierto me encantaba mucho, esa pijama fue un regalo de Navidad por mi tía Lucy. Me acosté en mi cama y no podía conciliar el sueño.
Cuando desperté eran las 5:00 a.m, tenia el rayo del sol frente mi cara y que penetraba desde la ventana que estaba delante de mi cama. Me metí al baño y me duche y me puse mi uniforme escolar que por cierto odiaba consistía en un pantalón holgado guinda, una camisa blanca con lineas guindas en el cuello y en la parte de los brazos. Termine de arreglarme y me metí al auto que era un Ford gris y vi a mi madre que ya estaba dentro.

-Buenos días mama.

-Hola cariño, ¿como estas?

-Pues bien, ya sabes...

-¿Estas listo para irnos?

-Si ya vámonos.

Salimos del garaje y nos dirigimos a la escuela, era un día soleado, sentía que las hojas de los arboles murmuraban sobre mi. Cuando llegamos Kimberly estaba a un lado de la entrada de la escuela, baje de auto corriendo y me despedí de mi madre.

-Hola Eduardo

-Hola, ¿por que estas acá?

-¿Tu sabias que Carlos se va?

-¿Cuando?, ¿a donde?, ¿por que?

Kimberly empezó a llorar puso su cara sobre mi hombro y nos quedamos los dos llorando.

-Lo transfirieron a otra escuela gracias a sus calificaciones excelentes.

Me quede estupefacto, sentí un leve mareo y después la oscuridad...

Desperté en mi habitación, y no podía creer que Carlos lo transfirieran el era mi único confidente, cuando abrí lo ojos logre ver a mi madre y a mi padre, pude notar que me miraban con preocupación.

-Mama, ¿que paso?

-Solo tuviste un leve desmayo cariño, nada grave.

-Me duele un poco la cabeza, ¿tienen alguna Aspirina?

Mi madre saco un pastilla de su bolsa y me la entrego junto con un vaso de agua, mis padres me abrazaron y se retiraron de mi habitación.
Me fije en la hora y me di cuenta de que era hora de la fiesta de Paulina, me vestí con una playera color roja, unos pantalones de mezclillas azules, y mis converse negros.

Salí corriendo de mi cuarto y me dirigí hacia la puerta principal y salí. Cuando me fui hacia la casa de Kimberly me gusta observar todos los arboles moverse por el viento y en mi mente sonaba la burla de los chicos del salón (Cuatro ojos, Sabelotodo, Cerebrito) esa eran las razones por la cual no me gustaba asistir a las fiestas de los "Populares'', cuando estaba frente a la puerta de Kimberly toque y salio con su sonrisa resplandeciente como siempre, llevaba puesto unos pantalones vaqueros y una blusa negra (su preferida) y sus converse al igual que yo, y su cabello color negro y corto.

-Hola, ¿nos vamos?

-Si, por favor estoy muy ansioso por llegar-Tomamos un taxi y nos subimos en la parte de atrás, el chofer era un hombre robusto y moreno que tenia como 45 años de edad, cuando llegamos bajamos y le pago al chofer con un billete y lo recibió con una enorme sonrisa.

-Kimberly, no puedo, no quiero entran, ¡no voy a entrar!

-Vamos, no pasa nada estará muy divertido, solo sera un rato.

-Esta bien, pero vamos a entrar ya.

Cuando entramos estaba infestado de globos de varios colores y ahí estaban todos....

Y Por Esa Razon Te OdioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora