十三

6.3K 664 388
                                    


Respiré profundamente una vez más, él estaba ahí, realmente vino.

Ahora mismo yo estaba escondida detrás de una parada de autobús, a unos cuantos metros de donde mi ángel se encontraba, sin embargo, la parada metálica era demasiado grande para cubrirme perfectamente.

Di unos pasos hacia atrás para poder verme a través del reflejo, acomodé mi pelo para evitar que así se viera despeinado, después pasé a mi atuendo, esperando no encontrar nada que me dejara en ridículo frente a él.

—Debes empezar a usar medias —había dicho Yoongi unas horas antes—. Tienes piernas hermosas, te quedarían muy bien.

Me quedé viendo mis piernas por un momento; no paraba de moverlas, tal vez era la ansiedad. Yoongi podría tener razón...
Agité mi cabeza. No iba a hacer tal cosa, simplemente fue una sugerencia por parte de mi "amigo" y yo me rehusé, no era mi estilo.

No completamente lista y con un 5% de seguridad, salí de mi escondite acercándome al pelinegro quién en cuanto me vio sonrió ampliamente.

—Hola, JungKook —saludé forzando una sonrisa. Estúpido nerviosísimo.

—Hola, Krys. Que linda te ves.

¿Era acaso eso un cumplido? Ahora sí sonreí de verdad a pesar de su mentira, no había nada nuevo en mí en realidad, sin embargo traté de convencerme a mí misma que él en serio estaba siendo sincero.

—¿Entonces es cierto? —su suave voz me sacó de mis pensamientos, lo volteé a ver con el entrecejo fruncido, después recordé el porqué lo había citado.

—Sí, este —di algo bueno—. Estuve pensando, tal vez fui un poco grosera y exagerada, digo, al final no era tu intención.

Genial, no pude haber dicho algo más estúpido. Ese día prácticamente me hizo pedazos, pero mágicamente me doy cuenta que la única alterada y egoísta aquí era yo.

—No digas eso, tenías todo el derecho, no fuiste exagerada. Sinceramente me esperaba eso.

Oh vaya.

—Fue doloroso.

—Tienes que perdonarme por eso —bajé la cabeza, no esperaba que me pidiera eso, porque no podía perdonarlo yo también tengo dignidad y orgullo.

—SooJung —no me había percatado de la distancia que se encontraba de mí—. ¿Puedes mirarme?

"No, no, no, no. No lo mires"

En mi esfuerzo por evitar su mirada me quedé donde estaba, algunas —miles en realidad— veces me sentí intimidada cuando veía a los ojos ajenos fijamente. JungKook no era la excepción.
De repente sentí sus manos en mis mejillas.

Me sobresalté, no sé si era por el miedo o por esa increíble sensación que fue el sentir sus manos calientes en mi piel fría. Por muy increíble y tonto a la vez, pude jurar que me derretía bajo su tacto.

¿Alguien con más agallas podría decirle que no se apartara?

Siendo traicionada por mi cuerpo subí la mirada. Un paro cardiaco fue lo que casi me da; estaba tan cerca de mí, tanta era la cercanía que ahora me daba cuenta del hermoso lunar que tenía sobre su nariz.

—No te volveré a hacer daño, Krys —habló tan despacio y profundo, quería estar tan cerca de él, ¿por qué no me dejaba?—. Te juro que yo no seré el culpable.

Un juramento en vano.

Caminar junto con JungKook era de las cosas más maravillosas que me habían pasado, me divertía hablando, o más bien escuchando, yo entendía muy bien sus temas de conversación, pero hablaba con tanta emoción que nunca pude atreverme a decir algo.
Preferí mejor escucharlo, su voz es simplemente tan hermosa, debía apreciar cada momento.

lies ; jjkDonde viven las historias. Descúbrelo ahora