Solo tu profesora, ¿ok?

Epílogo

[Se publicó mal este capítulo, espero solucionarlo. Si desean pueden releerlo completo :D)

Narra Adrián

Luego de un mes aproximadamente volví a la escuela, y lamentablemente lo de Liliana y yo ya se había extendido bastante, o eso parecía en mi clase. Trato de negarlo o algo, pero siguen preguntándome acerca de eso -no es que no quiera a Liliana, al contrario, solo que no hay que darles razones para hablar a los demás, ¿no?- e incluso personas que ni me hablaban antes.

Ahora en la hora del receso estoy en la cafetería con Thomas, Rose y Alejandra. ¿Raro? Quizá.

-Aún no entiendo cómo estamos aquí los cuatro juntos en una mesa sentados- susurra Thomas a mi costado.

-Lo sé, pero no hay problema en eso, supongo,-susurro también, mientras las chicas conversan sobre algo que no logro escuchar.

-Esto a Liliana no le va a gustar... -dice gracioso. Doy un golpe en su hombro.

-Cállate, torpe -me vuelvo hacia mi comida.

-Solo quiere estar más cerca de ti- no había pensado en eso, pero lo dudo, yo hablé con ella y dejamos las cosas claras, o eso recuerdo.

Solo ignoro el comentario de Thomas y veo a Alejandra quien murmura:

-Rose, ¿ya te dije que esto es raro?

-Millones de veces, Ale.

-Oh vamos...-digo-, gracias, por pasarme las clases y todo, Rose-le dedico una sonrisa amistosa.

-No hay de qué-sonríe con la cabeza baja a punto de comer su sándwich.

-¿Y qué es de nuestra...exprofesora Liliana? -pregunta Alejandra haciendo énfasis en "exprofesora". Trato de no haber ningún gesto. Supongo que no fue en mala gana.

-Bastante bien-sonrío al recordarla-, de hecho, estamos súper felices con la noticia.

-¿Qué... qué noticia?-dice Rose al escucharme.

-La noticia de nuestro bebé.-escupen todos su comida, literalmente, y sus ojos se abren como nunca. Trato de mantenerme serio pero estallo en risas.

-¿¡Qué te pasa, Adrián!?-grita Rose notablemente alterada.-Es una estúpida broma, ¿no?

-Tranquila, Rose...-habla Alejandra.

Le doy un mordisco a mi manzana evitando su pregunta y veo como se pone nerviosa. ¿En serio eso logró preocuparla?

-Adrián parece, pero no es tan idiota como para embarazar a Liliana. Aunque quién sabe...-la castaña en frente mío rodea los ojos y vuelve a hablar:

-¿Podrías hablar, Adrián?

-¿No les gusta la idea? -niegan con la cabeza-.¿Ni un poco?

-Que no. ¿Estás loco? No creo que sepas al menos cambiar un pañal. Menuda bromita te has jugado...-

-Admitanlo, fue gracioso-río.

-Para alguien no lo fue...-balbucea Thomas con sarcasmo y entiendo la indirecta.

-Bueno, no es para tanto, cállense y déjenme comer, adolescentes hormonales-dice Alejandra.

-Tenemos la misma edad, ¿sabes?-le responde Thomas y ella rueda los ojos.

-¿Me acompañas al baño, Ale?

-Sí, vamos.

Se van, como típicas chicas al baño juntas. Veo a mi alrededor y Danielle está caminando hacia nuestra mesa. Vaya y ella aparece, hace tiempo no veo a esa chica, aunque tampoco es que quiera verla ni nada.