CAPITULO 4

883 100 16
                                    

Alec

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Alec.

-¿Qué hacen? -Nos consulta.

-Sólo conversábamos. -Respondimos los dos al unísono.

-La cena está servida, además están dando "La Amenaza Fantasma", ¿Qué les parece si vemos la película?

Kyle embozó una sonrisa, era lo único que podía competir con la fiesta. Lo pellizqué con disimulo.

-Auch. -Exclamó tocándose el brazo.

-No te atrevas. -Le advierto mentalmente.

-Gracias padre pero teníamos planes para ver un matatón de "Cuentos desde la Cripta".-Señala Kyle. -No tenemos mucho apetito en realidad, ¿Podemos saltarnos la cena?

Bien hecho hermanito, papá odia esa serie.

-Oh, bueno, no importa la meteré en el refrigerador si desean comer después. -Su rostro marca decepción, sentí un poco de pena, casi me veo tentada a aceptar pero no, la fiesta, o más bien Evans, es más importante. Cierra la puerta, lo escuchamos bajar las gradas.

-No me mires así. -Le reprocho. _Has visto esa película ¿cuántas veces? unas treinta.

-Si no fuera porque me alimentaré te hubiera dicho que no.

-Gracias. -Le sonrío con sarcasmo y me asomo por la ventana.

- Tienes el conteo de las cámaras. _Indago.

-Sí, tenemos diez segundos entre una y otra, para cruzar sin ser detectados.

-Ok, hagámoslo.

Kyle enciende el televisor para que parezca que de verdad estamos arriba. Salimos al techo y ya en la orilla me subo a su espalda. Mi atlético hermano salta y espera el recorrido de la siguiente cámara, logramos burlarlas, ya en la acera me coloca en el suelo.

-¿Has engordado? -Lo hacía para molestarme. -Te siento más pesada.

-Idiota. -Le saco la lengua y él me sonríe.

Nos dejamos guiar por la música hasta estar en frente de una casa llena hasta la médula de adolescentes. Cuando ingresamos a la residencia, la mayoría nos mira con curiosidad, adentro jóvenes hablando en grupo, parejas en los rincones intercambiando saliva, otros bailando al ritmo de Sia, amaba esa canción "Cheap Thrills", le tomo la mano a Kyle y nos vamos a pista. Aunque nunca hemos ido a un baile, vemos mucha televisión, nos encantan los especiales musicales, con solo detallar cómo se mueven los bailarines es suficiente para repetir sus movimientos. Nuestros cuerpos se acoplan a la perfección, tanto que pronto tenemos audiencia, nos hacen círculo, cuando la canción termina, puedo jurar que incluso, hay chicos con la boca abierta, sí lo sé, somos buenos.

-Hola, pudieron venir. -La voz de Roller nos saca de nuestro momento de gloria. -Vengan los presentaré al resto.

Comenzó a presentarnos a personas que no nos importaba conocer, pero por cortesía sonreímos. Mi mirada hacía un escaneo un poco desilusionada al no ver a Evans.

HÍBRIDOSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora