-Draco carraspeó y volvió a dirigir la mirada hacia el pergamino que tenía en la mano, donde estaba apuntado el presupuesto de cada departamento sólo para confirmar lo que se habia aprendido de memoria para la reunión-. Bueno..si.. -se enderezó y sacó una pluma y un tintero, garabateó el permiso de financiación del proyecto y se lo entregó a los asistentes a la reunión-. Bueno, si no hay nada más en lo que pueda ayudarles...podemos dar por finalizada la reunión.
-Harry analizó a los magos hasta que se fueron y después, cerró la puerta y sonrió-. ¿Que te ha pasado, hurón? Parece que has... -se interrumpió al ver la cara de Draco-. ¿Estás bien?.
-¿Que si estoy bien? ¡Me has asustado, idiota! -lo miró y frunció el ceño- y te he dicho que no me llames hurón. -se cruzó de brazos en un gesto infantil que a Harry le hizo sonreir-. ¿Que has visto?.
-avanzó hasta Harry , quien puso la espalda recta para intentar alcanzar una mayor altura-.
-No he visto nada. -levantó una ceja-. Espera..¿Te has asustado? ¿El gran Draco Malfoy asustado por una posible amenaza? -sonrió con suficiencia-. No ha pasado nada, sólo he recordado una canción; anda, te llevaré al hotel si no hay nada mas que quieras hacer... -extendió la mano hacia el brazo de Draco para realizar la aparición conjunta pero este se apartó-.
-Quiero ir a ver a mi madre , ella no sabe que eres mi auror asi que espero de ti un comportamiento aceptable; no me apetece que mi madre escoja para mí otro auror...menos competente.
-recorrió el cuerpo de Harry desde la cicatriz hasta sus zapatos-.
-Potter..¿Dónde narices compras tus túnicas? Vamos, te prestaré una más elegante -puso una mano en el hombro del moreno y se aparecieron en la habitación de Draco, un poco mas grande y con decoración diferente a la de los aurores-. Sientate por ahi, veremos que puedo hacer contigo.. -Harry obedeció y se sentó en la mullida cama de Draco mientras este sacaba dos túnicas-. Creo que te quedaria mejor la verde, resalta tus ojos.
-Harry se quitó la camisa y Draco lo miró por un segundo antes de sonrojarse y girarse de cara al armario, desde luego no queria ver como el auror se desnudaba; Harry terminó de vestirse y le sonrió a su compañero, sabia que al oji-plata le fastidiaba que le sonriera así. Como habia previsto, Draco dejó los ojos en blanco-.
-Entonces a la casa de Ciss...Narcissa -se corrigió Harry inmediatamente. Apoyó la mano en el hombro de Draco y sin mirarse se aparecieron en la mansión-.
-Potter.. -lo llamó el rubio, pronunciando su nombre con un tono más curioso que enfadado, pero Harry sabia que iba a preguntarle asi que se encaminó a la verja-.
