La Hermana Adoptada De Marinette[Adrien/Chat Noir y Tu]-RESUBIENDO-

Familiarizada

El suelo de todo París tembló y antes de que Marinette pudiese abrir la puerta del portal de su casa tuvo que echarse hacia atrás.

"Si termino pronto con este akuma, tendré toda la tarde libre." Se autoconvenció.

Miró a sus alrededores, le dio luz verde a Tikki para que saliese y se transformó.
Rápidamente se dirigió hacia la Torre Eiffel y observó con cuidado donde podría estar el akuma.

—My Lady, ¿alguna pista?

Chat Noir se acercó con su sonrisa coqueta y a la que estaba mal acostumbrado, pero una vez más no impresionó a Ladybug.

—Distraigámoslo, si estamos más cerca tal vez sepa cuál es el objeto en el que está el akuma.

Ambos superhéroes se miraron y se dirigieron hacia el gran gorila.
Por alguna razón el que siempre salía volando por los aires era Chat Noir, pero esta vez llevaba una trayectoria demasiado rápida y lejana.

Tan lejana que acabó chocando con una pared, de un pequeño edificio. Para finalizar su mala suerte, tenía un gran ventanal abierto, pero solo pudo caer al lado, contra los duros ladrillos.

—¿Estás bien?

Una voz femenina habló desde el balcón de la casa pero solo se le veían los ojos, unos de un café oscuro.

"Tal vez me he dado un golpe tan fuerte que ahora escucho a la gente hablar, ¿español?" Pensó el rubio mientras se apoyaba en el balcón para después ponerse de pie.

—No hay nada de que preocuparse señorita.—Habló el superhéroe haciendo como que el golpe no le había dolido pero hasta veía a tres chicas iguales en aquella habitación.—Nunca había visto a trillizas.

Y cayó hacia un lado.
La chica lo sostuvo antes de que tocase el suelo y lo sentó en la cama.
El rubio pestañeó un par de veces ahora ya no eran 3 chicas iguales, sino que era una sola, quien lo miraba con preocupación.

—¿Entonces no sois trillizas?—Preguntó él mientras movía un poco su cabeza.

—Oh dios mio, ¿se habrá roto la cabeza o por qué la mueve de esa manera?—Habló en voz alta la pelinegra mientras daba vueltas sin saber que hacer

Mientras tanto el superhéroe que ya había recobrado sus 5 sentidos confirmó que lo que había escuchado sí era español.

—Estoy bien, tranquila.—El rubio se levantó y trató de tranquilizar a la joven pero ella no dijo nada.

—No francés.—Dijo cruzando los brazos en señal de error y que no entendía de que le hablaba.

Eso hizo que Chat Noir soltase una pequeña carcajada sin malicia pero que hizo que ella se sintiese abochornada.

—Está bien, gracias.—Dijo y rápidamente salió de la habitación para ayudar a Ladybug.

Había tratado de dormir no lo había conseguido y aunque Marinette se había ido, Sabine la invitó a conocer la tienda que estaba en la planta inferior.
La comunicación se basó en Google traductor, pero no importaba porque se sentía cómoda.

Incluso la invitaron a hacer pan, una experiencia que amó. Un verdadero lugar agradable.

"Esta tarde vas de compras con Marinette, ¿no?"
Estaba escrito y _______ asintió en respuesta con una pequeña sonrisa.
Tom y su esposa parecían encantados con su respuesta afirmativa y poco después, la asiática acompañó a la chica para que comenzase a alistarse.

Revisaron la pequeña mochila que traía consigo y con suerte había colocado un pantalón de deporte, una camiseta negra, ropa interior y algo de maquillaje.
No se había replanteado la ropa que llevaba porque había estado con ropa de hospital o en pijama, pero agradeció haber tomado esa mochila antes de salir corriendo.

—Tienes que comprarte un móvil.—Comentó la mujer mientras buscaba un jersey.

Pero ______ no entendía y solo asintió.

Un rato después se quedó sola de nuevo y después de varios días miró su cara frente al espejo.
Tapó las oscuras cuencas de sus ojos con corrector y trató de ponerse rimel y labial para parecer un poco más despierta.La ropa de deporte no la hacia ver muy fina, pero estaba cómoda y era lo que importaba.
Solo quedaba esperar a que volviese Marinette.

Cuando se llegó la hora de fin de clases, esperó con ansias su llegada, hasta que una vibración fuerte se sintió por todo el edificio.

"¿Aquí también hay temblores? Nadie me avisó."
Pensó ella mientras pensaba donde meterse.

Había tratado de esconderse hasta que llegase alguien a ayudarla pero el estruendo cesó y se asomó a su ventana.

Jamás había visto un gato humano volar, bueno nunca había visto un gato humano pero en ese preciso momento uno de ellos se había chocado cerca de su ventana como los bichos en el parabrisas de un coche.

Era un chico rubio con orejas de gato y ojos de un verde intenso que se balanceaba y hablaba como si estuviese borracho.
Hablaba y hablaba francés, pero no había que entenderle para saber que ese golpe lo había dejado desorientado, sobre todo cuando lo vio casi caer hacia un lateral.

"¿Él es lo que llaman uno de los famosos superhéroes de París?"

Tuvo un fugaz recuerdo sobre las revistas que había recolectado una de sus hermanas pequeñas.
Ladybug y Chat Noir, eran los famosos superhéroes franceses que estaban dispuestos a luchar contra el villano que producía akumas.

Tampoco pudo quedarse pensando mucho tiempo porque el pánico invadió su cabeza cuando no sabía como ayudar al chico.
Pero quedó bastante sorprendida cuando el francés la miró y trató de calmarla, aunque eso es lo que supuso.
Para su sorpresa, antes de irse, entendió su despedida.

"¿Será que ya aprendí francés?" Dijo su tonto inconsistente con una sonrisa que rápidamente desapareció cuando cayó en cuenta de que la había hablado en español.

El gran estruendo no tardó en desaparecer y junto a él un destello que arreglaba las cosas que habían sido rotas por el villano.

—______,¿estás bien?—Preguntó Tom quien había vuelto junto a Sabine rápidamente y la abrazaron.

La joven vio en sus ojos la preocupación y solo pudo darles una pequeña sonrisa, haciéndoles saber que no había ningún problema.

Poco después llegó Marinette a quien también recibieron con preocupación, pero se excusó diciendo que se quedó a salvo en el instituto.