32. Isaac

10K 578 60
                                    

Pedido por zoegracemclean

Luego de tantos años papá había tomado la decisión de volver a Beacon Hills. Cuando mamá había muerto el no pudo soportar más estar en aquel lugar y nos tuvimos que ir a México, dejando todo atrás. Beacon Hills era mi hogar, y lo extrañaba horrores.

Hace 1 semana que estábamos de vuelta acá y hoy era mi primer día de clases. Estaba nerviosa, ¿podría ser que me encuentre con viejas amistades? Si así es, ¿podrían recordarme?.

Caminé por el corredor con la cabeza gacha, tratando de bloquear las miradas curiosas, pero siendo yo eso no pasó, porque choque con alguien y terminé en el piso.

-Auch -me queje, había caído de cola.

-Lo siento tanto -dijo el chico de rulos y ojos celestes, que veía conocido pero no podía reconocer. Estiró su mano y me ayudó a parar-. Enserio lo siento, iba distraído.

-No te preocupes -negué y sonreí vergonzosamente-, fue mi culpa,no iba mirando.

-¿Acaso nos conocemos? -frunció el ceño y se cruzó de brazos-. Siento que te conozco de algún lado.

-No lo sé -me encogí de hombros.

-Tal vez me equivoqué -suspiró y sonrió de lado-. Me llamo Isaac.

Isaac. ¿Por qué me era tan conocido ese nombre? Busqué en mi memoria, revolviendo recuerdos, hasta que encontré aquel doloroso.

*Flashback:

Mamá había muerto hace 1 semana y como si fuera poco, papá quería que nos vayamos. Me negué, quise impedirlo, pero sólo quedaban algunas horas.

-Tengo que despedirme de Isaac -dije casi en un susurro a mi papá-, tengo que hacerlo.

-Bien -asintió débilmente, dándome la espalda-. Pero no te tardes.

Corrí fuera de la casa y crucé la calle. Isaac era mi mejor amigo desde que tenía uso de razón. Gracias a que era mi vecino siempre jugábamos juntos y hacíamos todo juntos... Pero ahora tenía que dejarlo y sentía una presión en el pecho que me mataba. Toqué el timbre y espere unos segundos a que mi ruloso amigo me abra.

-¿Todo bien conejita? No esperaba verte -dijo con una de las más lindas sonrisas, una que estaba segura que iba a extrañar.

No pude evitarlo y me tiré a sus brazos mientras lloraba desconsoladamente. Algo confundido, pero sin decir nada, empezó a acariciar mi espalda y tratar de tranquilizarme diciendo lindas cosas como "todo está bien". Pero bien sabía yo que no lo estaban.

-En-serio lo siento -me disculpe rompiendo el dulce abrazo-, juro q-que no quie-ro.

-¿De que hablas? ¿Qué pasa conejita? -pregunté sumamente confundido.

El apodo de conejita me lo puso porque sabía que eran mis animales favoritos y siempre andaba comiendo zanahoria.

-Tengo que irme -susurré sabiendo que me escuchaba.

-¿A dónde?

-A México.

-¿Vas de viaje? -preguntó esperanzadoramente.

-No rulos -negué con un nudo en la garganta-. Me voy a vi-vir allá.

Su cara se descompuso y sentí como mi corazón se partía. Volví a abrazarlo y luego de un dulce beso me fui a mi casa, dejando mi corazón en aquel lugar.

*Fin del Flashback.

-No creí que fueras a olvidarme tan rapido ruloso -bromee con un nudo en la garganta que me obligue a tragar.

Pareció estar perdido unos segundos, pero luego abrió los ojos y me miro como si de un fantasma se tratase.

-¿Conejita? -susurró, pero pude oírlo.

-¿Qué esperas para abrazarme?

No terminé de abrir los brazos que su cuerpo chocó con el mío. Lo abracé fuerte, como el a mi, temiendo que se tratase de un simple sueño, uno de los mejores sueños que nunca tuve.

-No te das una idea de lo que te extrañe -murmuró mientras apoyaba su pera en mi cabeza por la diferencia de altura.

-Créeme que si -murmuré con una sonrisa contra su pecho.

-No vuelvas a dejarme conejita.

-Nunca Isaac.

-¿Lo prometes?

-Lo prometo.

Los días pasaron y se transformaron en meses y no podía pensar en ser más feliz de lo que era. Estaba de vuelta en Beacon Hills, había hecho unos grandiosos amigos y tenía al que amaba a mi lado.

-¿Qué hacemos? -preguntó mi amigo Stiles.

-Miremos una película -contestó Malia, su novia.

-Vamos por helado -dijo Lydia parándose y arrastrando a Kira a su auto.

Salí de la cocina con el bowl de palomitas y me senté sobre el regazo de mi novio Isaac. Scott extendió su mano para comer pero le pegué, apartandolo.

-Aunque con tus super poderes de hombre lobo no te haya dolido eso, te recuerdo que mi novio también tiene -le saqué la lengua burlonamente.

Isaac sabía lo mucho que odiaba los secretos, por lo que antes de pedirme de ser su novia me contó el suyo, y por lo tanto el de sus amigos. Al principio fue toda una sorpresa, pero mientras el este a salvo, porque sabía que no iba a lastimarme, no podía importarme menos.

Scott e Isaac rieron en respuesta. El alfa verdadero se levantó y giré la cara a ver a mi novio.

-¿Ya dije que amo tus ojos? -sonreí mientras los miraba.

-Muchas veces conejita -respondió sonriendo dulcemente.

Sonreí de igual manera y besé sus labios.

-Te amo.

-También yo rulitos.




Díganme, ¿les gusta más cuando escribo en 1ra o 3ra persona? Personalmente me da igual, ¿que dicen?.

teen wolf imaginasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora