AlexDespués de nuestra pequeña discusión Wade propuso para mejorar la situación, salieramos nosotros dos, un tiempo para él y yo sin nadie más. Decidimos ir a las cascadas, pues desde la primera vez que las ví me fascinaron. Todo estaba tan silencioso pero era de esos silencios cómodos y relajantes, ambos estamos sumergidos en estas aguas cristalinas, miraba atentamente hacia una pequeña flor, la verdad este especie de bosque me agradaba aunque me gustaría algún día ir a otro lugar, he escuchado de NY y es raro pero de pequeña tenía una amiga (de hecho mi única amiga) que era de allá, decía que era un lindo lugar y que ¡había nieve! no se que habrá pasado con ella después de todo lo que pasó en el pueblo, un salpicón me saca de mi trance, Wade ríe, sonrío y le lanzo agua devolviendole el acto.
- no debiste hacer eso - amenaza, río encogiendome de hombros, luego ya no estaba frente a mí pero el agua se movía, mi sonrisa se borró y estaba alerta a algún movimiento, en eso halan mi pie por lo que grito del susto, bajo el agua veo a Wade sonriendo, toma mi cintura mientras coloco mis brazos alrededor de su cuello, y sin esperar más juntamos nuestros labios en un húmedo beso que tanto anhelaba.
Salimos a la superficie riendo, lo abrazo, él da un beso delicado en mi frente por lo que mi corazón late alegre.
- te amo - murmura, siento el calor en mis mejillas, de seguro estoy como un tomate, asiento levemente abrazandolo.
- yo también ..te amo mucho - respondo.
Él sonríe y yo igual, el ambiente de torna cálido, donde estamos él y yo lejos de todo el mundo, solos y felices disfrutando de la presencia del otro, me atrevo a acercarme y unir nuevamente nuestros labios esta vez en un beso más lento, delicado y tierno, sus labios son tan suaves que me tientan a no dejar de besarlo, sus manos bajan a mi cintura dónde me acercan más a él, luego una de sus manos va a mí rostro uniéndonos más. Un sonido rompe nuestra burbuja, nos separamos lentamente y miramos hacia donde proviene el ruido, hago una mueca al verla frente a nosotros de brazos cruzados y un rostro serio, de seguro nos ha visto y la verdad eso me alegra.
- ¿Emma, que haces aquí? - pregunta Wade, me cruzo de brazos al igual que ella, ella solo sonríe incomoda, luego de lanzarme una mirada de mal gusto vuelve a observar a Wade quién debajo del agua aún sostiene mi mano lo cual me anima.
- te estaba buscando, dijiste que saldríamos a dar una vuelta - mi mirada cae en Wade y frunzo el ceño, alejo mi mano y nuevamente me cruzo de brazos, él hace una mueca asintiendo y recordando lo que al parecer le ha dicho, ambas lo observamos esperando su respuesta, espero que no se vaya con ella, no se lo perdonaría, esta vez ya no. Él lo piensa demasiado y no tendría que hacerlo, Emma mira su celular impaciente.
- si - responde rascando su nuca - ya nos vamos - sale del agua dejándome con la boca abierta, y nuevamente sola, agacho mi mirada sintiéndome derrotada y humillada - voy a cambiarme, Alex - me mira apenado, esquivo su mirada enojada, salgo del agua y me coloco mis zapatillas, miro de reojo a Emma, lleva una sonrisa que no me agrada y estoy segura que celebra internamente pues el marcador está a su favor, paso por su lado de manera rápida deseando llegar a la mansión y encerrarme, pero antes Emma me detiene.
- escucha, Alex - comienza con un tono de sobra y grandeza, la observo directamente a los ojos demostrandole que no podrá intimidarme - te diré algunas cosas que parece que han olvidado aquí - enumera con sus dedos - primero: yo llegue aquí antes que tu ¿okey?, todos ellos fueron y son MI familia, segundo: Wade era mi novio..
- bien dicho Emma, era ya no. - digo interrumpiendo su discurso de villana, irritada y molesta, además el hecho de que Wade volvió a preferirla y dejarme a mi sola me enoja y no estoy para absurdos juegos, ella hace una mueca y se cruza de brazos alzando una ceja, imito su acción, es sorprendente lo falsa que es, cuando está Wade presente actúa como una Santa, pero cuando no está es todo lo contrario.
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Adoptada por vampiros
VampirEscapaba del orfanato, los guardias estaban detrás de mi ya no quiero estar en ese lugar, lo odio, los odio, por hacerme todo lo que me hicieron. Me tropecé con una rama por lo que caí hasta chocar con una roca, perdiendo la conciencia Al despertar...