Varias semanas habían pasado después de la audición de Naruto. Las cuales fueron molestas para el menor de los Uchiha, quien no entendía que tenía de especial el rubio, además de su voz.
Naruto se convirtió rápidamente en el amigo de todos los miembros de On A Friday, excepto de uno. Salia todos los lunes con Juugo a quién le ayudaba con el refugio de animales, era una persona de lo más cálida, sólo que su aspecto aparentaba lo contrario.
Con Suigetsu eran los miércoles, al principio creyó que el dientes de tiburón era un total pervertido, bueno, en realidad eso no cambió, si era un pervertido pero no con él. Además solían bromear siempre, y ambos tenían el mismo pasatiempo favorito; molestar a Sasuke.
Con Gaara era diferente, ya que sólo lo podía ver en los ensayos, que eran cada viernes. Éste siempre lo apoyaba, aunque Naruto se sentía mal por haberle quitado el puesto, sabía que Gaara aún tenía esperanzas de entrar a la banda y la única razón era por su ex.
Y con el que pasaba más tiempo era Shikamaru, su amigo de la infancia. Nara aparentaba ser serio, pero era gran persona con los que consideraba sus amigos, era lo más cercano a un hermano para él.
Por último estaba Sasuke, “el teme” como le había apodado el Uzumaki. No tenía ninguna conexión o lazo con él, aunque fueran vecinos.
***
Naruto entró al estudio con una expresión claramente de enfado, mientras maldecía en voz baja. De hecho, era el último en llegar.
—¡Jodido calor! —expresa con rabia.
Todos dejaron lo que estaban haciendo para ver al rubio, sus bocas se abrieron y el azabache frunció el ceño.
El rubio lleva puesto unas bermudas y una camiseta que deja a la vista sus notables clavículas, su rubia cabellera está protegida por una gorra negra.
—Hey, idiotas, vamos a ensayar —les ordena Sasuke, para ir por el rubio y tomarlo de la camisa—. Y tú dobe, deja de llegar tarde.
—Sueltame, teme —reprocha Naruto.
—Gracias, rubia, ahora tengo que solucionar un problema —murmura Suigetsu, dejando el estudio para ir al baño.
—Tsk, maldito dobe —lo suelta, acercándose a los demás.
—Por cierto, ¿y Gaara? —pregunta Naruto al aire, esperando una respuesta.
Está seguro el rubio que se pueden escuchar grillos.
—Está enfermo, iré a visitarlo hoy, después del ensayo—dice Sasuke tomando su guitarra.
«¡Qué no te contagie el sida, amigo!». Se puede escuchar por parte de cierta persona.
—Te acompaño —se ofrece Naruto, siendo ignorado.
Esto era algo normal para el rubio, ya que el azabache siempre le ignoraba, incluso fue un milagro que le respondiera. Pero, aún no comprendía el por qué. Naruto sabe que tiene una buena voz o eso es lo que le dicen, incluso lo alabaron en la audición, excepto Sasuke quién le soltó un; «no me convence, pero estás dentro».
—No comiencen sin mí, bastardos.
Naruto sale de sus pensamientos por la voz de su compañero, ubicándose enseguida donde está el micrófono.
—¿Te has aprendido la letra? —le pregunta Juugo desde su lugar.
—¿La letra? Mhn —asiente el rubio rascándose la nunca nervioso.
Sasuke bufa molesto.
—Toma —susurra Shikamaru, dándole la hoja de las letras a Naruto—. Eres un problema.
—Gracias-dattebayo.
El ensayo pronto comienza, escuchar la voz del Uzumaki aún es espectacular para la banda, incluso para Sasuke. Naruto canta más emocionado de lo normal, y nadie entiende por qué.
Después de ensayar la misma canción por más de cinco veces, se toman un descanso, para ir a tomar agua o hacer otra cosa.
—Creo que ya a quedado —sonríe por primera vez en el día el azabache.
—Todo gracias a la rubia y su hermosa voz —dice orgulloso Suigetsu abrazando al rubio.
—Idiota, tengo calor —Naruto se separa del otro, quitándose la camiseta, el calor lo está matando.
—Yo te ayudo a quitártelo, Naru-chan —Suigetsu le guiña un ojo, bromeando.
—Vayan a un hotel —aconseja Shikamaru con una expresión de asco.
—Vamos di que sí, Naru-chan —lo vuelve a intentar acercándose hasta él.
—Aléjate, idiota —Naruto intenta no reír con la voz fingida de Suigetsu.
—Está vez, sólo deja te ayudo a quitar la mosca de tu pecho —Y acto seguido, Suigetsu le tuerce el pequeño pezón a Naruto.
Naruto únicamente se ríe, y maldice, ya que es una de sus zonas sensibles.
—Ya déjalo, bastardo —Sasuke le da un zape en la cabeza al peliazul.
—¿Por qué a mí? —Suigetsu suelta al más bajo, para sobar la parte golpeada.
—¿De qué se ríen? —pregunta Sasuke al escuchar cómo Juugo y Shikamaru ríen sin vergüenza alguna.
—Eres todo un príncipe, rescatando a la rubia —suelta Shikamaru.
—Sólo me enoja, no me van las cosas homosexuales —responde sin expresión alguna.
—Recuerda cuándo Gaara te la chup...
—¡Cállate, idiota!
El caos pronto empezó, y un rubio sobandose el pezón en el suelo, estaba perdido. ¿Qué acababa de suceder? Se pregunta.