Capitulo 32

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- No puedo protegerla cuando estamos en clase ni en ningún lado de la escuela por esa norma de no juntarse con los del otro clan pero si puedo dar mi sangre para salvarle la vida lo are quieras o no.

Puede saborear un liquido espeso y salado recorriendo por mi garganta. Pronto pude sentir el tacto de nuevo, notaba como una mano llena de cicatrices me cogía la mano fuertemente y una respiración tranquila a mi lado.

La sensibilidad de mi cuerpo volvía a mi, abrí los ojos y como no ahí estaba Sasuke dormido a mi lado con sus dedos entrelazados con los míos, sonreí y acaricie su lacio pelo azabache.

Las horas pasaban y yo aún no me podía mover todo de mi había vuelto, la vista, el tacto, la oída pero para mi desgracia aún no podía mover las piernas, no podía caminar.

De un momento a otro el chico se levanto deprisa y se escondió en un solo movimiento, en los primeros segundos no pude entender muy bien su reacción pero no tarde mucho al escuchar la voz de una ardilla zorruna, era Karin. Karin avanzaba lentamente por la habitación como si estuviera vigilando de que no había nadie ahí cuidandome, una vez que se aseguro y su confianza volvió camino con seguridad y con rapidez hacia la cama donde estaba recostada, sin poder huir me hice la dormida. Cuando Karin estaba al lado de mí cama empezó a reírse se acerco aún más a mi y empezó a acariciarme mi pelo sin parar de reír.

Escuchaba la respiración de mi novio desde la otra punta de la habitación desde el armario donde se había escondido, su respiración era fuerte y rápida, mi subconsciente me decía que Sasuke tenia ganas de salir de su pequeña cárcel y atacar a la zorra pelirroja de Karin.

- A sido bueno idea lo del veneno y mira que mi padre me decía que era muy arriesgado, gracias a ti podré casarme con mi diablillo, he podido matar a la heredera de mí clan enemigo delante de todo el mundo sin que nadie sospechara si eso no es ser la mejor dime tu lo que es serlo, ah es verdad no puedes estas muerta.

- Quita tus sucias manos de ella puta- Sasuke acababa de salir del armario donde había estado escondido todo este tiempo.

- Amor, mira lo que he hecho ,hora tu padre me dará la aprobación y podremos ser marido y mujer- dice mientras se abraza al chico.

- Así que has sido tu quien casi la mata, ya lo sospechaba no hay tan mala puta en esta escuela aparte de ti- de repente se escucha un golpe seco y después los pequeños llantos de una mujer.

- ¿ porqué me haces esto? no ves que yo te quiero que todo lo hago por ti, para que podamos ser felices tú y yo y nuestros futuros niños, todo lo hago por ti Sasuke- dice Karin sin parar de llorar.

- Pero yo no te quiero a ti, ni nunca lo are no puedo querer a alguien que necesita matar a una buena persona, dulce, cariñosa, solo para asegurarse que tiene pista libre, tú no lo haces por amor lo haces por que eres una mala persona y siempre lo has sido, encima de fea mala persona, Karin lo tienes todo, todo lo malo, y ahora largaté antes de que yo si te mate de una vez por todas porque ganas no me falta.- No pude evitar sonreír ante las palabras del chico es cierto antes ya me había dicho que me quería pero no de esa manera.

Cuando escuche que la puerta se abrió y se cerro no mucho tiempo después pude saber que Karin se había ido. Sin cuidado ninguno me levante de la cama y fui directa a los brazos del chico y darle un fuerte abrazo, nunca me había sentido así nunca experimente que es enamorarse de alguien hasta ahora.

Rodé el cuello del chico con mis débiles brazos, me puse de puntillas para poder llegar mejor a sus labios carnosos y darle un tierno beso. El beso no era como los otros que nos habíamos dado, este, era suave, lento, con un simple roce de sus labios en los míos todo lo que el sentía podía sentirlo Ya no solo era deseo ahora también era amor. Nos separamos por falta de aire y no pude evitar sonreírle.

- por primera vez soy feliz en este internado.

- Sakura casi te matan ¿ eso es ser feliz?

- Soy feliz por que ahora se que me quieres de verdad, que no es un plan de tu clan o por venganza, me quieres por lo que soy- de repente mi cara esta atrapada en sus manos.

- si hace falta te repetiré que te quiero cada segundo de lo que me quedé de vida- sonrío y deposito un pequeño beso en una de sus manos.

- Será mejor que nos vayamos de aquí, alguien nos puede ver y nos meteremos en más problemas, ya se que lo sabe la directora, hubo un pequeño momento en que pude escuchar, estoy segura de que ella nos ayudará , esta harta de esta estúpida guerra, bueno todo el mundo esta cansado de esta batalla un poco inútil, ¿ por que no pueden gobernar los dos clanes? encima mi clan no quiere ser el jefe solo quiere vivir en paz con los suyos, no tener que enterrar a nadie más, los padres están cansados de cambiar a sus hijos de colegio o enviarlos al extranjero para que no los mates, y, cuando ellos vuelven muchas veces ya no tienen a nadie... yo estoy cansada de todo el dolor que esta pasando mi clan...

- Sakura yo no puedo hacer nada... no ahora.

- Vámonos. - las manos del chico me cogen de la cintura haciendo que me sea imposible caminar para irme.

- Ahora no puedo hacer nada mí padre es quien maneja toda la mierda de la guerra, mi hermano y mi prima lo secundan, ¿ que puedo hacer ahora mismo si tengo las manos atadas por mi clan? solo podemos esperar a que todo esto acabe.

-¡ esperar a que acabe! entonces ves preparando mí funeral por que tu clan no pararan hasta que todos los Harunos estemos a diez metros bajo tierra, si eso es lo que quieres adelante- me deshago de su mano y empiezo a caminar por el pasillo hacia mi habitación. 

El internadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora