Había una vez un Mes con Estrés, 2/?

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Pasaron horas y horas, ya Mateo estaba sumamente cansado y Ru estaba tomando un descanso, que se convirtió en siesta aún sentada en aquella mesa.

-- Ru, yo ya debo irme, creo que tu deberías asearte e irte a la cama. – Dijo adormilado mientas es estiraba, al ver que aquella no se movía este la movió un poco para que se despertara. -- ¿Ru?...

El castaño veía con ilusión el rostro adormilado de la chica, y sentía que era su oportunidad para repetir lo que tanto deseaba. Un beso de Ru. Se acercó a ella, a sus labios color fresa para al menos tocar con sus labios los labios de aquella chica, cuando la puerta se abrió y le dio paso al de ojos azules.

-- Cielo, te traje tres cajas de chocolates, además algo para... Comer. –Vio aquella escena, en la que su novia estaba dormida y el moreno cerca, tan cerca de su rostro, casi besándola. -- ¡Oye!... ¡¿Qué mierdas crees que haces?! – Fue hacía él, tirando la bolsa de compras que llevaba en sus manos a la mesa, dándole sin querer en la cabeza a aquella chica

-- ¡Shut up! ¡No ves que duerme, maldito desconsiderado!

-- ¡Desconsiderado te voy a dejar el rostro! – Y le dio un puñetazo en la mejilla, le dolió la mano en seguida, pero sonrió ante el impacto en su cara.

-- ¡Maldita sea contigo! – Se le tiró encima, haciendo que este cayera, y entonces comenzaron a darse goles fuertes, a pelearse y a decirse insultos, entonces la chica se levantó.

-- ¡¿Qué están haciendo?! ¡Ya paren!... – Ellos no araban, así que hizo lo que toda persona podía hacer en ese casó, tomó una escoba y comenzó a golpearles, no muy fuerte, ero lo suficiente para que le hicieran caso.

-- ¡Ouh! ¡Para! ¡Eso duele!... – Decía el moreno para levantarse y dejar al otro, haciendo este lo mismo y levantándose.

-- Ah, pero los golpes que se estaban dando no dolían.

-- Pffff... ¿Los de este? Para nada, como los de una niña exploradora. – Dijo el moreno, en lo que el rubio lo empujó fuerte y entonces volvieron a pelear.

-- ¡Oigan! ¿Por qué estaban peleando?

-- Este iluso quería besarte, lo vi muy cerca de ti, ¡Dile que el único que puede hacer eso soy yo! ¡DILE!

-- M-mgh... ¿Eso es cierto?

-- Si, es cierto... ¿Pero qué te sorprende? Yo ya te había dicho que estoy enamorado de ti.

-- ¿Qué? ¿Eso es cierto, Ru? –

La Gran Mentira De Mi Perfecta Vida.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora