Capítulo 11: "Extrañándote"

589 49 9
                                    

Dos meses pasaron desde que Gokú se fue de la casa de su maestro, él seguía yendo a verlo para saber de su salud y darle informes del gimnasio, pero evitaba encontrarse con Milk, a pesar que él tenía ganas enormes de aunque sea verla de lejos, sabía que no estaba bien seguir pensando en ella, ya que la misma jovencita le había dado a entender que ella no sentía nada por él; así mismo evitaba encontrarse con algún integrante de la familia de su maestro ya que ellos últimamente le negaban el ingreso pero el jovencito valiéndose de su amistad con algunos empleados lograba ingresar sin que estos lo vieran, claro el anciano maestro no estaba enterado de ello, pues Gokú había decidido no decirle nada para no empeorar su estado de salud.

La salud del maestro cada día que pasaba se deterioraba más, sus familiares al verlo enfermo, trajeron diversos médicos para que lo atendiesen, pero todos decían lo mismo, que la enfermedad estaba ya avanzada y que no había nada que hacer solo esperar.

Milk seguía adelante con su relación tormentosa con Diecisiete, quién en una ocasión incluso había llegado a abofetearla porque ella no le correspondió el beso forzado que le robo.

Marón y Lunch, iban a visitar con cualquier pretexto a Gokú al gimnasio, para poder llegar a conquistar su corazón, ambas jóvenes estaban encaprichadas con el jovencito de cabello alborotado, pero a pesar de ello al darse cuenta de los sentimientos del joven hacia su prima pelinegra habían decidido aliarse para que cada vez que iban a verlo, hacerla quedar mal delante de él y así lograr que él joven de cabello alborotado deje de pensar en ella y ellas al fin tengan una oportunidad, pero no eran las únicas que luchaban por su amor, sino también Mai la secretaria, que en todo ese tiempo se había convertido en una gran amiga para Gokú, llegando a ser quién conocía más que cualquier otro los sentimientos del joven hacia la pelinegra, llegando incluso hacer su consejera.

Fin de semana: "Habitación de Milk"

La bella jovencita pelinegra con lágrimas en los ojos miraba la pequeña rosa roja y la tarjeta que había venido en la caja de chocolates que Gokú le había regalado el día de noche buena mientras pensaba: ¡Te extraño tanto¡ aunque no podía ser tu amiga, me conformaba con tenerte cerca, ahora no sé qué es lo que harás o quién estarás, lo poco que se de ti es por las conversaciones de Marón con Bulma o con Lunch, que siempre andan discutiendo por ver quién llega a conquistar tu corazón primero, pero ellas no te aman, al menos Lunch, no, ella solo quiere jugar contigo y tu no mereces ello, eres demasiado bueno, para que jueguen con tus sentimientos, pensaba la pelinegra mientras sollozaba despacio abrazada a su almohada.

Gimnasio Dragón:

Una coqueta pelinegra vestida con un conjunto color azul, entraba a la oficina de Gokú:

¡Hola Gokú¡ nuevamente con esa carita, decía la pelinegra mientras le colocaba su tasa de café sobre su escritorio.

Si Mai, no puedo dejar de pensar en ella, la extraño demasiado, dijo Gokú con nostalgia.

Gokú, ya hemos hablado de ello, te estás haciendo daño, ella misma te dijo que no siente nada por ti, decía la pelinegra sentándose frente al joven de cabello alborotado.

Lo sé Mai, pero la amo, ¿qué quieres que haga?, ni estando lejos de ella no puedo dejar de amarla y luego lo que dice Vegueta, dijo Gokú.

No sé porqué el joven Ouji, te mete ideas en la cabeza, dijo Mai.

El dice que Milk, no es feliz, que ella no ama a Diecisiete, que está con él por darle gusto a su padre, dijo Gokú.

Mira Gokú, no sé qué tan cierto sea eso, pero si ella te dijo que no te quiere debe ser así ¿no?, dijo Mai.

TODO POR TIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora