TODO POR TI

Capítulo 15: "La proposición"

Tres semanas pasaron desde aquel beso en la piscina, desde aquel día Milk evitaba encontrarse con Gokú a pesar que ella sabía que debía conquistarlo como le dijo su madrastra, ella no podía siquiera mirarlo a los ojos pues tenía miedo a no poder cumplir con lo que su madrastra le hizo prometer por la salud de su padre y terminar cediendo ante la ternura y el atractivo innegable del apuesto jovencito.

Gokú para no incomodar a Milk, evitaba compartir la mesa con la familia de la pelinegra para no incomodarla a ella a pesar que aparentemente sus familiares de un momento a otro se volvieron más amables con él.

Marón y Lunch, a pesar de que sabían el plan de sus padres para recuperar su fortuna, seguían tras Gokú pero por el momento decidieron callar lo que sabían pues pensaron que una información así podía ser valiosa y fácil de manipular a su antojo si a Milk se le ocurría en algún momento corresponder los sentimientos del jovencito de cabello alborotado.

Gimnasio Dragón:

¡Gracias Vegueta¡ por todo tu apoyo, decía el joven de cabello alborotado.

Lo hago con gusto, pero dime ¿cómo vas con Milk y su familia?, dijo Vegueta.

Ellos han cambiado mucho conmigo y con ella, no hemos cruzado palabra desde hace tres semanas, dijo Gokú con nostalgia.

¿Porqué?, pensé que ahora que ya no anda con Diecisiete tu habías aprovechado para acercarte a ella, dijo Vegueta.

¿Ya no está con Diecisiete?, dijo Gokú sorprendido.

No, desde la lectura del testamento, su madrastra y su padre cancelaron el compromiso, ¿pensé que lo sabías?, dijo Vegueta.

Pues no, dijo Gokú sonriendo sabiendo que ahora no había pretexto para acercarse a su bella pelinegra.

Sabes está es tu oportunidad, pero si te sugiero algo ten cuidado con su madrastra no confíes nunca en esa mujer, dijo Vegueta.

¡Gracias¡ por el consejo, dijo Gokú.

En eso entro Krilin y le dijo: Gokú estamos organizándote una pequeña reunión para el fin de semana en casa de Piccolo por tu cumpleaños.

¿El sábado es tu cumpleaños?, dijo Vegueta.

Sí, pero con todo esto se me olvido, dijo Gokú sonriendo.

Vaya coincidencia, dijo Vegueta.

¿Porqué lo dices? dijo Gokú.

El maestro no te lo dijo nunca, decía Vegueta.

¿Decirme qué?, dijo Gokú.

Milk también cumple años el sábado, es un motivo más que indica que ustedes están predestinados, dijo Vegueta riendo.

Gokú al escuchar eso sonrió, mientras Krilin quedo sorprendido ante la casualidad.

Horas después:

Gokú salió del gimnasio y fue a una tienda a comprar algo para la pelinegra, luego subió al auto que utilizaba de la familia del maestro y regreso a la mansión.

Mansión:

Hoy día se lo propondré no tenemos porque dilatar tanto el tiempo, cuanto más antes se inicie el plan más rápido terminara, decía la madrastra.

Está bien, dijo el padre de Milk.

Minutos después:

Un joven de cabello alborotado entraba a la mansión y subía las escaleras con un ramo de rosas rojas en la mano y un pequeño osito de peluche. El joven camino hacia la habitación de la pelinegra y toco su puerta.