Body Swap: En el Cuerpo de mi Crush

Capítulo 16: Todo Regresa a su Lugar

-Pokémon y los personajes le pertenecen a sus respectivos dueños-

[Recuerda: "Ash" = Serena; "Serena" = Ash]

[Nota Feérica: ¡Esto es todo! ¡Al fin llegamos al final de la historia! ¡Este es otro final alternativo, no la continuación del capítulo anterior!]

*Beep* *Beep* *Beep*

Así sonaba uno de los aparatos que monitoreaban los signos vitales de una chica de cabellos color miel. Ella había acabado de recibir una explosión de energía psíquica y por tal motivo estaba mal de salud.

Desgraciadamente, la máquina comenzó a acelerar la tasa con la emitía los sonidos. Llegó a un punto en que los tonos se oían como uno sólo.

-¡Qué molesta es esta cosa!- decía Serena mientras dejaba caer al piso el sensor que monitoreaba su pulso, el cual no hace mucho se lo había quitado de su lugar.

Algo en la mente de ella hizo que el tiempo de detuviera cuando escuchó su voz.

Se bajó de la cama de hospital; caminó un poco para llegar al baño y una vez enfrente del espejo, se quedó con la boca abierta.

Unas ligeras lágrimas de felicidad salían a la vez que ua sonrisa se dibujaba en su rostro. Estaba feliz porque al fin toda el desastre se había acabado.

Luego se acordó que ya no podía jugar con el cuerpo de Ash (al menos mientras está despierto).

Durante un momento se quedó su cara igual; le salió un tic en el párpado inferior y ahora sí se molestó.

Dió un grito, agarró el espejo y lo usó para golpear el lavamanos; el cual gracias a su fuerza y no tanto al material, se quebró al igual que la tubería, el piso, la pared, entre otros.

Refunfuñó un poco, pero paró cuando se sorprendió al notar que su pelo había crecido unos milímetros de más gracias a algún que otro pedazo del difunto espejo (descanse en paz).

También notó que se rompió una uña al hacer ese desastre.

Sip, Serena estaba de vuelta.

[En alguna habitación]

Ash se levantó como si ninguno de sus músculos fuera capaz de moverse a voluntad. Cuando se estiró para poder andar como una persona normal, se rascó la panza. Entonces se puso a pensar en ecuaciones trigonométricas avanzadas de física cuántica de segundo grado por algún raro motivo. Cuando le salió la pantalla azul de Windows se dió cuanta de que se sentía 'tocado' (ah, y que también estaba en su cuerpo).

Por instinto, caminó hacia el baño y se empezó a peinar y acomodar el cabello. Luego se sintió estúpido.

-¿Pero qué me pasa? Yo nunca me peino. Oh, con que esto es un cepillo.- pensó espontáneamente.

Después de unos momentos, le dieron ganas de orinar. Otra vez, intuitivamente se sentó en la taza del baño; sólo para sentirse tonto otra vez.

Ash estaba de vuelta también.

[Milisegundos más tarde]

-¡"Ash"! ¡"Ash"! ¡"Ash"!- gritaba Clemont mientras tocaba la puerta que convenientemente estaba cerrada con seguro cuando volvió a su cuarto compartido -¡Ya está listo el desayuno! ¡Me tomó mucho tiempo lograr que Korrina no me matara otra vez y que me ayude a cocinar; así que mejor...- fue interrumpido por un portazo en la cara... cómicamente... creo.....

-¡Clemont, watashi no yūjin, adivina lo que pasó! ¡Tardas mucho! ¡Volví a ser yo! ¡Soy Ash! ¡Soy Ash!- alardeaba emocionadamente el azabache mientras saltaba de alrededor de su 'yūjin'.