NUEVE

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Sin pensarlo dos veces tomo el brazo de la ebria de mi amiga y la arrastro hasta el bar que está lleno de gente. Perfecto, siempre fui buena metiéndome en lugares pequeños y esta vez si que me sirvio.

Al llegar hacia un taburete vacío, Lila empieza a reír a carcajadas y pide otro trago y yo estoy concentrada en ver si Jungkook me reconoció o no como para detenerla.

Él no puede saber que estoy aquí, y si lo sabe, mantenerlo lejos. Muy lejos.

Jungkook y yo en una misma fiesta, multiplicado por alcohol y elevado a Lila súper ebria... Creanme, no daba nada bueno.

-Tranquilízate.- Lila se apoya en mí y todo su aliento alcoholizado se filtra por mis fosas nasales.- Eres buena escapando de la gente, nunca logro encontrarte cuando vas al baño en la escuela.- ríe.- Como en esa película de laberinto que vimos aquella vez.

-Creo que necesitas dejar de beber.

-¿Qué? ¿Por qué? Estoy sobria. Lo juro.

Y entonces su cabeza cae bruscamente contra la barra.

-¿Lila?- Ella ni se mueve.

¡Perfecto! Un coma alcoholico. ¡Lo que me faltaba!

-Ay no, no me hagas esto.- llorique levantando su cabeza.

Miro hacía todos lados buscando algo o alguien que me ayude. Pero obviamente es lo más inútil que he intentado esta noche. Mi amiga era una de las muchas que estaban desmayadas. Asique con cuidado la tomo del brazo y no sé cómo logro acomodarla en mi espalda, a caballo.

Mientras la sostengo con una mano, con la otra, trato de sacar el celular de mi bolsillo. Teníamos que volver a casa y en el camino inventar alguna excusa por el estado de Lila.

Al tenerlo en mi mano respiro aliviada. Pero al ponerlo frente a mí, me lo sacan rápidamente y con fuerza.

-¡Oye!

-¿Qué haces aquí?

No puede ser cierto.

Jungkook.

Su mirada era seria, sin ninguna expresión como siempre cuando me mira. Ni siquiera sé porque está hablando conmigo. Solo vine a una fiesta. Nada más.

-Devuélveme mi celular.- digo bruscamente.

-Respóndeme primero. ¿Qué haces aquí?

¿Qué bicho le pico? Repito; solo vine a una fiesta. Todo el mundo lo hace.

-Eso no te importa.

Nuestros ojos se desafian buscando ganar. Los dos somos tercos y sabíamos que esto no llevaría a nada, pero tampoco queríamos ceder.

-Tú te lo buscaste.- dice para luego mirar hacia atrás y hacer un gesto con la cabeza.- Jimin.

Jimin aparece de la nada y de un solo tirón me saca a mi amiga desmayada, la pone en su hombro y vuelve a ponerse detras de Jungkook.

-¡Hey!- reacciono.- ¡¿Qué haces?!- Trato de acercarme a Jimin pero Jungkook me empuja devolviéndome a donde estaba parada.- ¡Devuélveme a Lila!

-Ella esta invitada, tu no.

¿Qué?

Creo que nunca me había sentido tan indignada en mi vida. ¿Quién se cree que es este idiota? ¡Ni siquiera es su fiesta! Mi sangre hervía a grados sobrehumanos, quería golpearlo hasta dejarlo inconsciente y con su linda carita desfigurada. Ya quisiera ver quien lo querría de esa forma.

Dolls Eyes (RM)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora