La peli azul se le quedó mirando durante unos cuantos minutos preguntándose qué le sucedía que se mostraba tan amable. Él sólo la miró de reojo y luego se recostó en la cama con sus brazos detrás de la cabeza, aún sumido en sus pensamientos y haciéndose las mismas preguntas.Bulma se terminó de cambiar y antes recostarse en la extensa cama recordó que su amiga Louisa, le había dado una nota; se apresuró a buscar su ropa de ese día, el saiyajin la miraba con una ceja arqueada, sin entender lo que hacía.
—¿Qué rayos haces, mujer? —se decidió a preguntarle.
—Nada que te incumba, ¡Y mi nombre es Bulma, genio! —giró la cabeza para mirarlo con el ceño fruncido reclamándole, no tenía intenciones de decirle lo que sucedía, además, no era quien como para darle explicaciones según ella.
—Idiota —le respondió él, girándose dispuesto a dormir.
Ella solo le lanzó una mirada asesina y luego sonrió al encontrar finalmente aquella nota. Entro a el baño y se sentó a la orilla de la bañera, abrió el papel y leyó:
Bulma, búscame en el comedor a media noche. Necesito hablar contigo.
–LouisaMiró un reloj cercano, no se había percatado de la hora, casi era media noche. Salió sigilosamente y al notar que el príncipe parecía estar profundamente dormido, abrió la puerta y salió de allí sin hacer algún ruido.
Se dirigía al comedor tal y como le había escrito su amiga.
—Bulma —escuchó al fondo del gran comedor mientras se encendía una pequeña vela.
—Louisa. ¡Estás aquí! —mencionó casi gritando mientras corría a abrazarla.
—Ya, cálmate. Guarda silencio, nos pueden descubrir —dijo correspondiendo aquel abrazo.
—Y dime, ¿por qué me has citado? ¿Qué sucede? —cuestionó curiosa al separarse.
—Verás, te tengo información jugosa —explicó mientras se sentaba en una silla cercana e invitaba a su amiga a imitarla.
—¿Cómo puede haber información jugosa en este Planeta? —ambas rieron.
—Bueno, ¿qué puedo decir? Estoy segura de que te interesará... —habló con un tono algo picarón mirado a su amiga, quien se encontraba confundida ante su tono de voz.
—Esta bien. Cuéntame —dijo, poniendo suma atención a su amiga.
—He estado en todo. Me pusieron a hacer miles de cosas domésticas, lo cual me molesta un poco, ya que no tengo más que hacer aquí, pero me entero de mil cosas. Esta mañana, cuando el príncipe vino con su padre le pidió personalmente que pudieras comer junto con ellos todos los días, desayuno, comida y cena. Originalmente el Rey hablaba sobre la "sirvienta" de su hijo como su cocinera personal, etcétera. Como si fueras una especie de esposa forzada. ¿Por qué crees que el Rey te miraba de esa manera durante el desayuno? —Bulma lo meditó, todo concuerda, se dijo— Al parecer, el príncipe tiene su lado lindo —terminó de hablar Louisa, esperando con ansias la reacción de su amiga.
—No tenía idea. De hecho... —se sonrojó— hoy, él me... —estaba realmente sorprendida y complacida, no sabía que pensar.
—¡¿Hoy qué?! —preguntó emocionada.
—Me... —díselo— besó —terminó su frase embozando una sonrisa y tocando sus labios mientras recordaba aquel mágico momento.
Lo pensó detenidamente por unos segundos y llegó a la cuenta de que tal vez se estaba enamorando de aquel príncipe saiyajin orgulloso y atractivo. Su amiga solo gritó y luego un silencio de tranquilidad invadió el lugar.
—¿Oíste eso? —se escuchó detrás de la puerta a los guardias nocturnos que tenían intenciones de entrar.
—Vete pronto o te descubrirán. Después hablaremos más. ¡Adiós! —se despidió Louisa rápidamente antes de salir dirigiéndose a su habitación comunitaria.
La peli azul hizo lo mismo e iba corriendo hacia la habitación que le correspondía. Mientras corría por los pasillos, le seguía pareciendo increíble el como nuca se había perdido en aquel enorme palacio.
—¡Aaaa! —gritó sonoramente al escuchar el crujido de los truenos y relámpagos de el diluvio que ocurría afuera.
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"Esclavitud u Orgullo" Vegebul [EDITANDO]
FanfictionDespués de hacer un viaje hacia el planeta Tierra, el Rey Vegeta consigue bellas mujeres terrícolas y las lleva al Planeta Vegita. Pero entre esas chicas, está Bulma Briefs, a quién deja a disposición de su hijo, el Príncipe Vegeta, como su esclava...