MARKED. Adaptación. Larry Stylinson

Capítulo Cinco

Louis

A Louis le agradaba el esposo de su jefa.

En un esfuerzo por pasar más tiempo con su esposa, Harry había decidido compartir el coche con ella al trabajo y viceversa. Como resultado, más a menudo que no, él y Louis hablaban mientras esperaban a Tanya para que terminara lo que fuera que estaba haciendo. Harry era un hombre de muchos intereses con una sed de conocimiento. El tiempo pasaba sin esfuerzo cuando estaba cerca.

Era especialmente encantador oírlo charlar sobre los hijos de su hermano. Liam tenía dos parejas de gemelos Irlandeses*, Vera y Henry de once y diez años, y Joseph y Abigail de tres y dos.

-Deberías haber oído a Joey jactarse cuando le dijimos que tenía edad suficiente para venir al gol en miniatura con los niños grandes. Todo el resto del tiempo antes de salir, se la pasó repitiéndole a Abby que no podía jugar con ella porque era un niño grande ahora. - Harry sacudió la cabeza- fue un malcriado al respecto

Louis se rio entre dientes.

- Suena como que se parece a su tío en ese aspecto.

-Qué descortés, Tomlinson. Tan descortés.

-Los llamo como los veo.

Él sonrió y rodó los ojos.

-No puedo decirlo con certeza, no tuve hermanos menores, pero sí suena como algo que yo habría hecho. Aunque para que conste, el niño tiene una madre. Me encanta Sophia, pero es una gran malcriada. Si vas a culpar a alguien, tal vez la manzana no cae tan lejos de árbol.

-Oye, te dije que los llamo como los veo - dijo Louis -Estás frente a mí. Ella no. Nunca he conocido a la mujer. Tú pierdes.

-Eso no es justo.

Él le acarició la mano de una manera conciliadora.

-No me gusta ser quien te lo diga, pero la vida rara vez es justa. Hablando de no ser justa, ¿Cómo lo tomó la señorita Abigail?

Harry dejó escapar un suspiro exagerado.

-Semejante drama. Durante todo el tiempo que estuvimos fuera, Sophia me envió snapchats por su insistencia. Estos pequeños vídeos de ella con grandes ojos llorosos y el perfecto puchero.

-Oh- Louis se puso una mano en el pecho como si hubiera recibido un disparo al corazón - La mirada. No la mirada.

-Esa misma- Dijo Harry con una solemne inclinación de cabeza.

-¿Qué tuvo que hacer el tío cariñoso?

-En el camino a casa, la recogí para que se uniera a nosotros a celebrar con los helados. Ella tomó el helado, por supuesto.

-Oh, por supuesto.

-Pero me ignoró todo el tiempo.

Louis lo señaló.

- Algo tuviste que hacer ahí. Puedo verlo.

Harry le hizo un guiño.

-No quería hablar conmigo hasta que le prometí que saldríamos. Solo ella y yo. Una salida solo para Abby. Me estoy tomando la tarde de mañana libre para llevarla a piscina. -Sonrió con cariño- Estoy convencido que ella es mitad pez. Pasaría toda la tarde en su piscina infantil sin Liam y Sophie la dejaran, pero ama la piscina grande.

-Wao, chica con suerte. ¿Y estás tomando tiempo fuera del trabajo para ella, eh?

Su sonrisa se volvió irónica.