—Y... ¿por qué ella?
Eliot se encogió de hombros:—Puede ser genético, pero ni mis padres ni yo padecemos eso. Y también es como se desarrolla el cerebro.
—¿Y esto nunca cambiará?
—Puede mejorar y no es una condición de riesgo, todo está en orden y es muy inteligente. Y hay diferentes métodos con los que se hace el progreso de la comprensión.
Luke frunció el ceño:—Pero a ella le gusta leer.
—Y se le es difícil.
—Dijiste métodos. Como... ¡terapia! El otro día dijeron que iba a terapia.
—Sí, hay un doctor que es psicólogo para jóvenes, las terapias son para conocer su psicología y ayudarle con el estrés y otros. Y para el aprendizaje hay maestros, que le dan clases extras, yo la ayudo en casa, tu la ayudas en su animo.. Y así.
—¿Yo?
—Luke, la dislexia no es solo letras, cuando tienes dificultades en algo... Eso te hace sentir inferior a otros... Y te crea mala autoestima. Por eso ella es tan callada, afecta la vida social, por eso es tan... retraída.
—Pero...
—Tienes que saber que cuando la conociste hubo un progreso, que ella confía en ti y le haces bien. Sé que te importa, por eso dejé de estar con ella todo el tiempo, tu me ayudas a cuidarla.
—Hay algo más... —dedujo el rubio.
—Sí... —murmuró Eli.
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#Maratón 8/?
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Miradas y Palabras Mudas | L.H
Short Story❝Ella era muy curiosa y detallista, pero callada y con miedo a hablar. Él era reservado y solo veía y escuchaba a sus libros, hasta que ella llegó.❞ --- Máximo: #44 en Historia Corta.
