Narrador Omnisciente
Maia estaba entre dormida y despierta en su cuarto, demasiado desanimada para ir al colegio.
No lloraba pues lo que sentía era más decepción que tristeza, solo se quedaba en su cama pensando en por qué había sido tan impulsiva.
El día anterior cuando su mamá se dió cuenta de que estaba llorando subió detrás de ella pero había puesto cerrojo a la puerta y no dejaba entrar a nadie.
Lo intentó su madre, su hermana e incluso Hayle, quien fue a su casa luego de enterarse por Matt del rompimiento; Pero Maia no quería hablar con nadie y no abrió la puerta.
Daniel bajó del auto de su madre y entró a casa de su mejor amiga.
- No estoy segura si ella va a abrirte la puerta - le dijo Lily Anne - ni siquiera ha querido comer.
- Va a abrir - respondió él seguro -.
Subió y al llegar a su puerta tocó suave.
- Seas quien seas, no quiero hablar, vete - dijo ella bajito -.
- Sofi, soy yo, Daniel.
- Que te vayas.
- Vamos a hablar Maia.
- No quiero hablar.
Daniel pensó unos segundos y habló de nuevo:
- Esta bien, no tenemos que hablar, pero abre por favor, estamos todos preocupados.
- ¿No puedes solo irte?
- Mmm... No, abre.
Pasaron unos largos segundos en los que Daniel se quedó parado ahí, luego se escuchó el cerrojo y lentamente la puerta se abrió dejando ver a Maia cabizbaja.
Daniel la abrazó fuerte y ella correspondió.
- Vamos a hablar pequeña, por favor, odio verte así.
- Esta bien, pero bajemos.
- Vayamos al jardín, necesitas aire fresco.
- Vale.
Maia se colocó sus zandalias y bajó con él.
- Maia mi niña - le dijo su mamá cuando la vió - que gusto que te sientas mejor.
- Lo siento mamá, de verdad no quería hablar.
- Comprendo hija, tranquila, dime si quieres comer.
- Gracias.- Cuentame bien, ¿Qué te dijo Matt? - le dijo Daniel una vez sentados en las sillas del jardín -.
- Claramente me terminó, dijo " no quiero seguir si voy a desconfiar de ti, no sería justo para ninguno".
- Vaya, si que fué directo.
- Matt puede ser tanto cursi como frío, no se iba a aferrar a nuestra relación. No después de haber perdido su confianza.
- Mira Maia, sé que tenías mucho tiempo con él, sé que lo quieres mucho y que te sientes muy mal por haber arruinado lo que tenían.
- Oye, gracias - le dijo ella con sarcasmo -.
- Lo siento. En fin, sé que te sientes muy mal pero Maia, no debes preocuparte, tienes 15 años, te queda mucho por vivir; conocerás otros chicos, te enamorarás de nuevo y algún día esto sólo será un vago recuerdo. No debes deprimirte por eso, esta es la etapa de arruinar cosas y arreglarlas, de romper corazones y que te lo rompan a ti, en un año o dos, a penas pensarás en como te sientes ahora. Piensa en lo que aún tienes, a tu familia, a tus amigas y a mi.
- Tienes razón Al, gracias, siempre sabes que decir y cuando.
- Para eso somos los mejores amigos ¿no?
- Los buenos, sí.
Daniel abrazó a su mejor amiga rodeándola completamente, Maia se sintió reconfortada. Estaba mejor, pues ya no estaba sola.
- Gracias por no dejarme sola - le dijo cuando la soltó -.
- No te dejaré sola Maia, para eso estoy aquí, volví por ti y aquí me quedaré.Fin.
N/A:
Oh my feelings asdfhñsjfka
#Llorando.
#SiSePudoTerminarYeeih
Última foto de Mis niños juntos :( :(
Gracias a ti! Por leer esto, quienquiera que seas y cuando sea que lo leas :)Nos leemos luego.
- ER✌😻
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A Partir De Ahora
Short StoryA veces no hace falta nada más que un amigo en momentos difíciles. Tenía algunos años sin ver a quien yo considero mi mejor amigo. No diré que no sufrí mucho al darme cuenta de su ausencia; pero aprendí mucho desde que se fué, cambié para bien e...