Al otro lado del teléfono #OIMAwards

Capítulo 3: Orden

Meliza

-Adiós papá -digo antes de que comience con su discurso.

Ya llevo una semana con el nuevo-viejo celular, y debo admitir que el juego de la culebra se me da especialmente bien.

Es muy entretenido, cuando me den mi nuevo celular se lo instalare.

Dejando eso aparte, hoy el equipo de basquetbol me ofreció puesto con ellos, pero lo rechacé y me quede en la biblioteca haciendo una investigación.

Tengo muchos trabajos y debo llegar temprano a casa.

Durante toda la semana los chicos se han ofrecido a llevarme a casa, pero hoy se quedarán practicando así que me toca llamar a mi padre o ... A Adam.

El número está bien, debería llamar a mi padre.

Un tono, tres, cinco...
Maldición.

-Vaya, no puedes vivir sin mí cierto? -Responde bromeando.
-Ja, ja, qué chistoso eres. -Digo poniendo los ojos en blanco.
-Ya en serio, por qué siempre me llamas? -Pregunta con interés.
-Intento llamar a mi padre y siempre me caes tu.
-Tienes mal anotado su número o algo así?
-No! Lo he revisado un montón de veces, es por el teléfono este.
-Que teléfono es?
-Un fósil del 2005
-Una Hills con un teléfono antiguo?
-Es una larga historia....
-Bien, no tengo tiempo, deberías resolver eso.
-No me digas

Y corta, esta vez el.

Hoy fue más agradable, tiene una voz dulce, me pregunto cómo será físicamente.

Agito mi cabeza para despejarme y marcó a mi madre.

-Hola? -me responde una voz temblorosa
-Mamá ? -Pregunto, no por que crea que es mi madre, sino para ver la reacción de la ancianita. 
-Hija? -Si, definitivamente el teléfono está mal.
-No, lo siento. Me equivo...
-No, quiero ser mamá , dime...
-En serio disculpe...
-Tranquila pequeña estoy aquí para ti...
-Hasta luego.

Eso es raro.
Mucho...

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He descubierto una nueva hazaña!
El número liga los móviles pero no los fijos! Así que a parir de ahora debo llamar a mi casa, responde María y le pasa el teléfono a mi madre por qué no quieren que hable con ella y decirle a mi madre que le diga a mi padre que me puede venir a buscar...

Si, es más sencillo de lo que parece.

Hoy los chicos del equipo no se vieron muy contentos cuando llegue a su mesa con una bandeja lista para sentarme.
Y rápido averigüe por qué....
Mellet estaba con ellos.

Tuve que sentarme con unas chicas que no me caen muy bien... Pero tampoco muy mal.

No me gusta cómo esta esto.

Quiero llegar rápido a mi casa así que marco rápido a mi padre.

Un tono, tres, cinco...
Oh lo olvide, debo llamar a mi casa

-Que? -responde Adam... Parece molesto.
-Lo siento, me equivoqué, es la costumbre....
-Lo siento, no vi quién era, hoy no es mi día.
-Ni el mío -suspiro.
-Todo me sale mal.
-Si, te entiendo... lo contrario a lo que piensas.
-Si! Y justo cuando crees que todo se arregla...
-Se atraviesan 10 problemas más.
-Meliza
-Adam
-No eres tan rubia como pensaba
-Que te den.
-Si me dan espero que sea pan.
Al escuchar eso se me revuelve el estómago.
-Qué ? -preguntó
-Que me den pan -repite, y sigo confundida. El suspira- sabes? No todos tenemos una  súper cena preparada para cuando lleguemos a casa.
-Oumm -no sé qué decir.
-Bueno, tal vez tú no, pero hay personas que debemos trabajar para respirar
-Eso es algo...
-Exagerado?
-Mm si?
-Si, lo sé, pero es para que te hagas una idea.
-Y tu padre?
-Trabaja
-Y tu madre?
-También.
-Y tú también? Wow pero no están tan mal entonces..
-No tienes ni idea.
-Bueno, se me hace... Tarde?