Capitulo 6

376 24 0
                                    

No dormí exactamente bien.

Gracias al cielo que es sábado. No creo que pueda hacerle frente a un día de clases después de todo lo que pasó ayer.

Sofi me lleva hasta mi casa. Aun es bastante temprano, cerca de las 9 de la mañana. Mi mamá aun está durmiendo. Lo sé. Para ella los sábados y domingos son sagrados. No se levanta sino hasta que es totalmente necesario.

— Uh, problemas a las tres en punto.

No sé de qué está hablando Sofi hasta que miro por la ventana y veo a Sebastián. Está sentado en la vereda frente a mi casa, su cabeza está agachada, sus ojos cerrados como si ni siquiera nos hubiera oído llegar.

Me despido de Sofi, quien me abraza apretadamente enfundándome un poco de valor. Anoche le conté lo que había pasado y se sintió culpable por no haber estado allí conmigo, pero lo desestimé sabiendo que ella no podía dejar solo a su hermano en casa de su padre.

Me bajo del auto y cierro la puerta de mi lado. Sebastián levanta su cabeza al instante. Ni siquiera alcanzo a dar más de cuatro pasos cuando él ya me tiene envuelta en sus brazos.

— Lo siento, lo siento Rose.

Me abraza con fuerza respirando mi olor y puedo sentir su corazón latiendo rápidamente contra su pecho.

Me aparto y solo entonces puedo verlo bien.

Está llevando la misma ropa de ayer. Luce tan cansado, sus ojos están rojos y hay círculos oscuros bajo ellos. Apenas y puede mantenerlos abiertos.

— ¿Hace cuanto que estas aquí?

Se encoge de hombros — Hace un par de horas. No podía dormir. No sabía a dónde habías ido — Prosigue — Te busqué aquí primero, pero tu papá me dijo que estabas en casa de Sofi, y fui allí pero el auto no estaba.

— Fui a casa de Sofi — Explico suavemente mirando fijamente sus ojos suaves con el sueño— Con su papá.

— ¿Rose?

— ¿Sí?

— Prométeme que nunca vas volver a manejar así. Deja que te lleve yo, Incluso si estas enojada conmigo, si no quieres verme, pero por favor no vuelvas a subirte a un auto así.

Luce tan preocupado y desesperado. Nunca lo había visto así.

— Lo prometo — Susurro.

Suspira exhalando todo el aire de sus pulmones. Deja caer sus brazos de mí alrededor y da unos pasos hacia atrás. Pone sus manos en los bolsillos de su chaqueta y baja la mirada — Gracias.

Lo observo mientras camina hacia su auto. Mi corazón brincando con fuerza en mi pecho.

— ¿Dónde vas?

No se da la vuelta, pero se detiene antes de abrir la puerta de su auto — A casa. Solo necesitaba ver que estabas bien.

— Pero yo... — Cierro mis ojos con fuerza. Odio verlo así. No puedo dejarlo ir — Estas cansado. Si tú no quieres que conduzca cuando estoy enojada, entonces yo no voy a dejar que conduzcas así cuando ni siquiera has dormido.

— Estoy bien.

— No — Camino los pasos que nos separan y tomo de su mano mirando sus ojos todo el tiempo — Quédate. Duerme un poco.

Veo que quiere discutir conmigo, así que susurro — Por favor.

Eso hace el truco. Asiente sin mirarme y finalmente deja que lo lleve. Abro la puerta con cuidado y la cierro suavemente una vez que estamos dentro, pero él se detiene cuando llegamos a la sala.

¿Solo un rumor? - #3 ¿Solo un beso?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora