Capitulo 7

323 22 1
                                    

Unos brazos asombrosamente cómodos empiezan a deslizarse lejos de mí unas horas después y me quejo.

— ¿Qué hora es?

— Van a ser las 6.

Demasiado temprano. Con mis ojos aun cerrados me doy la vuelta y arrojo mis brazos a su alrededor apretadamente.

Lo escucho reír — Tengo que irme Rose.

— Todavía no — Digo haciendo un puchero. Si estuviera totalmente despierta estoy segura de que habría estado avergonzada, pero como no lo estoy realmente no me importa. Es como no tener ningún solo filtro entre mi cabeza y mi boca. No estoy pensando lo que digo, simplemente se desliza de mis labios, así sin mas — Quédate conmigo un rato mas.

Su cuerpo se relaja y vuelve a acostarse más cerca de mí.

— Solo unos minutos más.

— Me gustaría quedarme así para siempre.

— Umm.... — Se enrolla más cerca de mí y siento sus labios en mi cuello — Creo que aun estas mas dormida que despierta.

Acomodo más mi cuello para darle mayor acceso— ¿Por qué?

— Porque jamás dirías algo como eso cuando estas totalmente consiente.

— Siempre digo lo que pienso.

— No siempre. Te guardas un montón de cosas.

— No es cierto — Paso una mano por su cabello y el ríe contra mi cuello — Um, me encanta tu voz en la mañana.

— ¿Ves? — Lo siento enderezarse apartando su cara de mi cuello y me quejo nuevamente cuando trata de alejarse de mi— Esas son cosas que no dirías despierta.

— Si lo haría.

— Está bien — Dice besando mis labios en su lugar — Así que, mmm...¿Qué mas te encanta sobre mi?

Me rio — ¿Tengo que elegir? Me gusta cada parte de ti.

Lo escucho reír también y siento sus labios sobre los míos suavemente — A mi también.

— ¿A ti también te gusta todo de ti? — Rio contra sus labios.

— No, a mí también me gusta cada parte de ti.

Te amo. Pienso. Y luego...

...¡Estoy completamente despierta!


Sebastián

Sus ojos se abren de golpe y su risa se desvanece. Siento como todo su cuerpo se tensa contra mi y luego se aparta rápidamente de mis brazos.

— ¿Qué sucede? — Le pregunto enderezándome.

— Nada — Dice mientras se levanta de la cama completamente despierta y se apresura a su armario para sacar su bata — Pero tienes razón, debes salir antes de que mis padres se despierten.

Um, está bien.

Aparto las sabanas y me siento al borde de la cama. Paso una mano por mi cabello mientras la observo ponerse la bata rápidamente. Recojo mi ropa y me la pongo tan rápido como puedo.

Una vez que estoy listo bajamos las escaleras con cuidado de no despertar a nadie y ella abre la puerta de entrada para que yo pueda salir.

Me detengo un segundo en la puerta para besar sus labios — Te veo dentro de poco.

— Adiós — Susurra.

Hay algo extraño en su voz. Me quedo mirándola unos segundos extras intentando descubrir que es lo que la está perturbando, pero ella pone una sonrisa en su rostro y le da a mi brazo un pequeño empujón juguetón.

— Vete ya.

Le sonrio antes de robar un ultimo beso de sus hermosos labios y camino hacia mi auto mirando cada pocos segundos sobre mi hombro para verla aun en la puerta. Le guiño un ojo antes de subirme y alejarme de allí.

Aun es temprano, pero el sol ya está comenzado a aparecer por lo que me apresuro por la calles lo mas rápido que puedo.

Cuando llego a casa Carmen ya está allí merodeando por la cocina y me estrecha la mirada cuando me ve aparecer en la puerta.

— ¿Quiero saber donde estabas? — Me pregunta con una ceja levantada.

Me acerco y beso su mejilla sonriendo — Posiblemente no.

— Mmm. Vas a ir al colegio ¿Cierto? Sabes que no me gusta que te pierdas clases.

— Por supuesto.

No faltaría por nada del mundo ahora que tengo una gran razón para ir a clases. Y no estoy hablando del estimulando entorno educativo.

— Bueno — Me dice mientras toma su bolso y lo aprieta bajo su brazo — Voy a ir a comprar un par de cosas que faltan, así que espero que cuando vuelva ya no estés aquí.

Palmea mi hombro mientras pasa y le sonrio antes subir las escaleras. Me doy una ducha rápida y miro la hora en cuanto entro a mi habitación. Las 7:00. Aun tengo un montón de tiempo para llegar temprano. Me recuesto un momento en mi cama y doy un gran bostezo. Anoche me dormí mucho después de la medianoche porque mirar a Rose dormir no es algo que pueda hacer siempre y no podía desperdiciar el momento durmiendo. Si que me quedé observando su hermoso rostro relajado con el sueño, sus adorables labios ligeramente entreabiertos, la manera en que su cuerpo se amoldaba perfectamente al mío. Fue una noche perfecta. Sonrio y ahogo un bostezo. Acomodo mi cabeza contra la almohada y cierro mis ojos.

¿Solo un rumor? - #3 ¿Solo un beso?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora