Continuación....
Narra: Gaster.
« Desde la llegada de ___ habían pasado ya cuatro meses, ella se había adaptado muy bien al mundo de aquí abajo, siempre se la pasaba con los niños, me alegraba tanto ver como ellos ya eran amigos tan cercanos... Pero mis planes con ___ no eran esos, yo la veía como una posible futura esposa... ¿Como? ¿Que que ocurrió con mi antigua esposa? Bueno, esa es historia para otro día mis pequeñas, ahora sigamos con la historia. »
Una noche me encontraba en mi habitación arreglando unos papeles para su majestad que debía de entregar esa mañana cuando escucho como llaman a la puerta, retirando mis gafas giro mi silla hacia la puerta la cual se abría lentamente dejando ver aquella aquella pequeña de cabellos rosas.
___: S-señor Gaster... ¿Podría dormir con usted? –
Gaster: ¿Hm? ¿Porque? ¿Pasa algo? –
Justo cuando termine mi frase se escucho un gran trueno resonar por toda la casa, ___ corrió hacia mi abrazando me con fuerza, un tanto sorprendido acaricie su cabeza para después levantarme y llevarla hasta mi cama donde la recostaba con cuidado.
Gaster: Muy bien, hoy podrás dormir aquí pero no hagas mucho ruido porque trabajo en unas cosas, ¿Si? Ahora duerme. –
___: Gracias! No haré mucho ruido, lo juro. –
Con una sonrisa la cubro con la sabana para después besar su frente y regresar a mi escritorio donde seguía con mi trabajo.
Habían pasado dos horas y ___ ya estaba dormida profundamente, con mi trabajo me dispongo a guardar y ordenar todo para después levantarme he ir hacia mi cama donde la observaba dormir tan tranquilamente… ese cabello, su piel suave y sus grandes ojos morados eran las cosas que me atraían hacia ella, ¿pero como ganármela? Eso sería después, ahora no podía hacer nada más que fantasear con cosas obscenas y observarla...
Sin pensar nada más me recuesto a su lado apagando las luces para seguir observándola, ella se giró hacia mi teniendo sus labios levantados como si esperase un beso, dudoso pensaba en diferentes posibles escenarios donde la besaba y donde no, si me descubría o no, mi mente se hacia nudos pero mientras más la veía más quería besarla... Si me descubre todo estará arruinado pero no podría perdonarme si dejaba pasar esta oportunidad única, sin pensarlo más me acerco hasta el punto donde nuestros labios rozaban y.... Lo logre, le di un beso, era tan dulce.
Pero algo andaba mal, sentía una sensación de sentirme observado más pensé que serían mis nervios... Pero vaya que me equivoque.
Narra: Sans.
Una noche lluviosa me encontraba dormido hasta que un fuerte apretón me despertó, abriendo los ojos veo a mi hermano abrazarme con miedo.
Papy: S-sans tengo mucho miedo... –
Sans: Vamos Paps, la lluvia no te puede dar miedo... –
Papy: Cállate!... Vamos con papá por favor Sans... No quiero ir sólo hasta con el... –
Sin poder negarme me pongo de pie y lo acompañó hasta donde papá, abriendo suavemente la puerta me asomó y lo veo acostado pero.... ¿Quien esta con el?
Papy: ¿Sans que pa- .... —
Sans: Shhhh... Espera.. –
Intentando ver mejor distingo un cabello rosa a su lado, ¿___? ¿Que hacia ahí? Antes de que me siguiera preguntando ese tipo de cosas lo vi, ¡la estaba besando! Pronto sentí un fuerte deseo de golpearlo pero Pap empezó a llorar y ahí fue cuando el se separó de ella y volteo rápidamente hacia nosotros, fingiendo llorar también tomó la mano de Pap y entró.
Sans: Papá tenemos miedo... ¿Podemos dormir contigo? –
Gaster: ¿N-niños? Uhm... Bien, pero ___ esta aquí también, le teme a la lluvia... Vengan. –
Mientras el se acomodada con ___, nosotros nos acostamos y nos pusimos a un lado el mientras que ella se encontraba del otro, el abrazaba a Pap y viceversa, yo sólo pensaba en lo que vi hasta que caí dormido...
A la mañana siguiente desperté con Pap abrazado de mi y ___ abrazando una almohada más no vi a mi padre, levantandome con cuidado de no despertar a nadie bajó a la cocina donde lo encuentro.
Sans: Hola papá. –
Gaster: Buenos días Sans, ¿Ya despierto tan temprano? –
Sans: Ya ves, es que no pude dormir casi nada. –
Gaster: ¿Y a que se debe eso? ¿Que soñaste? –
Sans: Soñé como un sapo forzó a que una princesa lo besara. ¿Vaya sueño verdad? –
Gaster: ...
Sans: ...
El silencio era incómodo, pero el lo rompió dejando los platos en la mesa para después acercarse a mi.
Gaster: Deberías dejar de ver tantos cuentos de princesas con ___ –
Sans: He he, posiblemente sea eso. –
Era bastante obvio que el sabía ya de que hablaba yo, pero no iba a tocar ese tema así que sólo lo vi preparar el desayuno...
Hasta aquí el capítulo 4!~
Sans: No sabía que podía llover aquí abajo.
Imai: Cállate niño celoso.
Sans: ... ¿Quieres pasar un mal rato?
Imai: ... ¡¡Y hasta aquí el capítulo!!... Sans di adiós.
Sans: Ya nos veremos luego.
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Un extraño amor. [ Sans x Reader ]
Casuale« Tu nombre es ____ y tienes la edad de 6 años cuando esta devastadora guerra entre humanos y monstruos inició. » « Tu padre murió en la guerra y tu madre desesperada huyó de todo eso dejándote a tan corta edad por tu cuenta, pero no todo era gris...