Volver a ti

Capitulo 1

Inuyasha y sus personajes no me pertenecen, yo solo los ocupo para crear mis más perversos pensamientos

Este fic participa en el Reto de Vitamina C del Circulo Mercenario.

Este fic contiene temas de BDSM y LEMON asi que si eres sensible a estos temas te sugiero que busques otro fic, la pareja es de Kagome y Bankotsu.

-/-/-/-

El amor no está en el otro, está dentro de nosotros mismos; nosotros lo despertamos. Pero para que despierte necesitamos del otro.

El club en el que se encontraba no era diferente a los que frecuenta, con mesas circulares y los asientos de cuero que rechinaban cuando te sientas en ellos, la gente divirtiéndose con sus amigos tomando ron, algunos whisky y unos más tequila y cerveza.

Aquello no era novedad para él, ver como algunos se iban a los cuartos traseros que tenía el club donde algunos incluso hay mantenía orgías, ver como las mujeres que venían sin pareja se paseaban con sus vestidos cortos o largos mostrando aquellos grandes escotes de los que poseían sus atuendos.

Ver a la gente bailar en medio de la pista, moviendo sus cuerpos al ritmo de la música variada que ponen, a los hombres repegarse a las mujeres diciéndoles al oído que podía pasar si acababan la noche en su cama.

– Hermano si sigues con esa cara acabaras espantando a mis posibles conquistas.

Entonando los ojos solo le dio un vistazo rápido para ver como su amigo ponía ojos de cachorro– Jakotsu eso no te queda, mejor busca donde se metieron esos imbéciles. – Aquellos ojos zafiro que poseía, con las luces de neón les daba una tonalidad más profunda ocasionando que el sexo femenino se acercará, para tratar de llevárselo una noche a su cama.

Con un puchero trato de hacer cambiar a su amigo oji zafiro, más de este solo recibió una mirada fría, resoplando se alejó para buscar a los demás, lamentaba no poder seguir hay pues le había echado el ojo a un joven de cabello plata, buscando a sus demás amigos que ya habían tardado demasiado, observó una jaula bajar con una belleza vestida de blanco mas no fue eso lo que le llamo la atención si no el saber de quien se trataba.

Regresando a donde estaba su casi hermano, lo encontró con una peli negra de pechos exuberantes, que fácil se veían eran gracias a una cirugía, sentándose empezó a sudar al ver que poco a poco se alejaban de la pista de baile, dejando libre para el show que se llevaría a cabo, pues este no era un club normal como cualquier otro, si no uno donde se podía practicar el cambio de parejas y practicar el BDSM sin problema alguno.

Su amigo él sabía que no era feo al contrario para poseer 27 años tenía una piel de tez morena se mantenía en excelente forma física, su cabello azabache que lo mantenía agarrado en una larga trenza y aquellos ojos zafiro que cualquiera que los veía sabia la arrogancia que estos demostraban, mas su grande cuenta bancaria era motivó por lo que mujeres como la que en ese momento se encontraba en sus piernas se le acercarán.

Aquella joven en especial que aborrecía por haber alejado a la única que le convenía a él, que con todos sus defectos lo amaba, y nunca se interesó por su cuenta o que regalo caro le pudiera otorgar, ella era sencilla y el mejor diamante en bruto que, aquél que lo encontrara sabia su precio y valor.

Esa mujer frívola no era capaz de mostrar algún otro sentimiento más que la frialdad, su cabello negro lacio que le caía a sus caderas era la sumisa de Bankotsu, ya llevaba varios años con ella, por eso las varias operaciones estéticas que esta se había hecho, a lo largo de los años, su piel parecía de porcelana demasiada blanca para su gusto, aquellos ojos negros que no revelaban nada en si solo era una muñeca de arcilla solamente.