9. Huracán.

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Capítulo 9.

En el ojo del huracán.

Kibum se acomodo mejor su abrigo, abrió el paraguas que llevaba en su manos y comenzó a andar por las solitarias calles, la lluvia no paraba y el frío aire se colada por sus huesos haciéndole tiritar, camino a paso rápido hasta la pequeña farmacia, donde saludo al hombre que atendía, pidió lo que necesitaba para darle al niño y pago saliendo del establecimiento, caminando a paso rápido.

Se detuvo antes de cruzar la calle, su corazón latía acelerado, podia sentir una mirada penetrante encima suyo, apretó al mango de la sombrilla y la bolsa dónde estaba él medicamento, dando largas sacadas cruzo la calle, se sentía como en una película de terror, la luz del farol comenzó a parpadear, ahora solo faltaba que saliera el asesino y le clavara un cuchillo en el pecho o le cortará la yugular... Sin embargo no hubo nada de eso... En cambio solo sintió una mano que le cubrió la boca y lo llevó a un cajellón, un maldito callejón oscuro y sucio que aprestaba a basura.

—Sssh bonito - la mandíbula de Kibum temblaba sus piernas estaban igual e incluso peor, las lágrimas se acumularon en su cuerpo —No te preocupes que ya estas acostumbrado a esto, imagina que solo soy uno más con el que te acuestas por un poco de dinero - el rubio negó con la cabeza eso no podia pasarle, no ahora que necesitaba llevar con urgencia las medicinas para el menor —¿No? Que mal bonito porque tenía grandes expectativas sobre ti

Tan pronto el chico término de hablar  lo arrojó contra la pared, un pequeño quejido doloroso salió de los rosas labios, el chico nuevamente se acercó y colocó la mano en su boca tomando con la otra las de Kibum
—¡Hey! Debes apurarte, no tenemos toda la noche.
Kibum giro el rostro a la entrada del callejón, los reconocía, ahora sabía dónde escucho esas voces antes... Lo chicos de la universidad que lo molestaban, eran ellos.
Sin más el rubio comenzó a removerse en brazos de su agresor intentando así liberarse, si le habían roto un peluche a Taemin y lo insultaron, no sabía que esperar para él.
Un fuerte dolor de cabeza se instalo al sentir que su atacante le estrellada contra la pared
—Lo quería hacer por las buenas pero no quieres... Ahora sabras lo que es un hombre de verdad.
El chico le sonrió de manera burlona, al ver que el rubio seguía adormecido por el golpe le despojo de su ropa.

Kibum lloraba, gimoteaba negando a que el chico continuará, sentía que su cuerpo era profanado de la forma más sucia y lastimera posible, sus manos al igual que su quijada ardían al sentir que él chico le lastimada para que no pudiera soltarse y no gritara pidiendo ayuda.
Cerro los ojos con fuerza dejando más lágrimas salieran por sus mejillas y mojaran la mano ajena, la impotencia que sentía en ese momento no se comparaba con ningún otro dolor que alguna vez tuvo, al sentir que el chico soltaba un fuerte gemido, le indicó que su agresor había terminado.
—Me avisas si tienes otro bastardo - el castaño chico le soltó y lo dejó en el callejón deshecho mientras más lágrimas salían, los sollozos no se hicieron esperar, como pudo se acomodo la ropa, todo su cuerpo dolía, las piernas le temblanan, deteniéndose de la pared avanzó toda la calle que faltaba para llegar a su departamento por miedo a caer al suelo, lo único que ahora esperaba es que Taemin ya estuviera dormido y Minho se hubiese ido, no quería ver a nadie, no en ese momento en que se sentía tan mal.
Con pesadez abrió la puerta del pequeño edificio encontrando frente a él a Minho.
—Kibum... - el alto se quedó en silencio solo mirando al rubio, sin dudar un poco se acercó y lo abrazo con fuerza sintiendo que el chico comenzaba a llorar, a liberar ese llanto que desde hacía algunos minutos atrás tenía atorado —Llora, llora todo lo que tengas que llorar
Kibum se dejó abrazar, se sentía bulnerable, sucio, usado, una mezcla de sentimientos negativos se apoderaron de su cuerpo.
Con cuidado Minho le ayudó a subir los escalones, Kibum lucía tan débil tan deshecho que parecía se podría romper en cualquier momento, ya en su departamento, lo llevó a su habitación.
—Tomare un ducha
Minho asintió y le dejó solo yendo a ver que Taemin siguiera dormido.

Kibum miro su cuerpo, bastantes hematomas rojizos cubrían su piel blanca, pasaba las uñas con fuerza por las partes que el chico le había tocado, su piel ardía, la lágrimas ardían, todo era una mierda...





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Ahora ya pueden matarme :)

Asdfghjklñ  pobre de mi Kibummie 😱😱😱😱😱
Bonito inicio de semana. 😘💕

Don't Judge Me [MinKey]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora