Begin Again 2. ➸ j.b | OS

05 ➸ "Necesito arreglar las cosas contigo."

Viernes. 23 de septiembre, 2016. Viernes. Rao's Restaurant, New York City. 9:30 pm. 

Justin: ¿Recuerdas cuándo solíamos ir cada fin de semana a la casa en la playa que tenía mi padre? 

Justin: Yo sé que lo recuerdas. 

Cassie: Deja de mandarme mensajes, estoy con Oliver. 

Justin: ¿Recuerdas cómo te gustaba que te besara el cabello antes de dormir, y cómo me pedías que lo acariciara mientras cantaba Maroon 5 para ti? 

Justin: No estoy pidiendo que vuelvas a estar conmigo. Sólo quiero que aceptes una cena conmigo, como amigos. Para recordar viejas épocas.

Cassie: Luego hablamos, Justin. Ve con Hailey, que posiblemente te divertirá más que todos nuestros momentos juntos. xx

"¿Cassie? Estoy hablando contigo hace media hora y no pareces estar escuchándome. ¿Qué tiene de interesante tu móvil?" La suave pero masculina voz de su acompañante la volvió al mundo real, haciendo que asentara los pies sobre la tierra y su mirada se corriera de aquel aparato electrónico que estaba posicionado en el restaurante que Oliver había insistido por ir.

Aunque no era amante de aquellos lugares tan caros, no podía dejar de admirar la belleza que éste tenía. Tan sólo iluminado por algunas velas en las mesas y algún que otro farol sobre las paredes, aquel lugar tenía un toque único. El aroma a rosas y a frescura estaba impregnado en sus fosas nasales desde el primer momento que pisaron aquella sala para poder compartir una cena juntos. Algo que ella se estaba privando puesto que el mayor de los Bieber no paraba de mensajearla desde que, hace unos días atrás, había logrado conseguir su número telefónico. 

La verdad era que, volverlo a encontrar había producido que ciertas hormonas se revolucionaran y que no pudiera dejar de pensar en él. Sus mensajes recordando cada uno de sus momentos felices no hacían más que hacerla sonreír y llorar al mismo tiempo. En primer lugar, sonreír porque habían sido momentos sumamente felices para ella y, en segundo lugar, llorar al darse cuenta lo estúpida y engañada que había estado en todo momento al pensar que él la amaba tanto como ella a él. Y por otro lado estaba su amante, Hailey. No entendía por qué seguía tan obsesionado con ella cuando el mismo día que habían firmado los papeles del divorcio, él se había entregado a la rubia en cuerpo y alma, besándola frente a ella como si no existiera más que ellos dos. Aunque no había visto a aquella muchacha alrededor de su ex esposo, no dudaba en que siguiera en su vida, siendo ocultada para la vista del mundo exterior. 

"Perdón, Ollie. Sabes que mi trabajo en la oficina cada vez es peor. Las chicas querían preguntar algo sobre la edición de la revista." Murmuró sintiendo un pequeño nudo en la boca del estómago al tener que mentirle al muchacho que había sido su sostén en todo momento. 

Nunca habían admitido estar en una relación formal. En realidad, no eran pareja más que unas personas que salían y la pasaban bien juntos.  Y ello no era así porque York no quisiera, si no que Cassandra, todavía resentida por su relación anterior, no quería tener nada que ver con una relación amorosa hasta que pasara el tiempo suficiente y su corazón estuviese completamente sano. Oliver la entendía y la apoyaba en cada una de sus decisiones, mas no estaba del todo seguro si quería que ella tan sólo fuese su "amiga con derecho a roce". Estaba bien compartiendo besos, abrazos, salidas y tardes en su casa, pero necesitaba más. Necesitaba saber que ella lo quería tanto como él había logrado quererla al conocerla a fondo luego de trabajar juntos los últimos ocho meses. 

"Sabes que no me importa. Sólo que vinimos aquí para pasar tiempo juntos, y porque debo decirte algo importante. Pedirte algo, en realidad." El muchacho deslizó su mano con cierto disimulo por la mesa hasta llegar a la ajena, entrelazando sus dedos con los de la chica, para acariciar el dorso de su mano con dulzura y suavidad, mirándola como si de la flor más preciosa estuviera entre sus dedos.