Alas

Capítulo 1

-Por qué hace tanto frío, por qué tengo que salir, quién sabe, ni yo lo sé. - Me rasque la cabeza buscando un por qué.

 - Tengo que llegar rápido, si no, no van a esperar, quedé en verme con ellos a las 9 de la mañana,  no puedo creer que salí de mi casa justamente a esa hora y me falta la mitad del recorrido. ¡ah! - Grite desesperada. 

- No queda más opción que usarlas.

Junte todas mis fuerzas para poder sacarlas,  de mi espalda salieron unas alas enormes y negras, algo muy normal para mí. 

- Seguramente se deben de estar preguntando porque alas? Bueno se los diré mientras llego al lugar de encuentro con mis amigos.

- Nunca se han preguntado que será su vida en un futuro?, nos irá bien?, pues bueno yo si, siempre, todos mis días me lo preguntaba, yo sabía que no tenía ni una sola oportunidad de poder ser alguien en este mundo, alguien como yo no sabe nada sobre su futuro. Entonces un día sentía algo extraño en mi espalda, eran una alas muy pequeñas, por supuesto como toda chica de preparatoria me asuste y no sabía que hacer al respecto. Un día me pregunte, por qué son negras y no blancas?, la respuesta me vino a mi, no sabía como, solo vino, la gente que le salen alas negras significa no tienen ni una maldita idea de lo que va a ser de su futuro, ese tipo de gente no es fácil de encontrar y la gente que le salen alas blancas significa que ya tienen todo asegurado para su futuro, y que les irá bien en su vida.

- Qué tienen que ver alas con un futuro, no lo se, lo único que te puedo decir con toda la seguridad es que yo soy la encargada de hacer salir esas alas, tengo que hacer amigos para poder conocerlos y en el momento en que tengan confianza de mí, les saco las alas de su espalda para asegurar o desmoronar su futuro y momentos después desaparecen como si nunca hubieran salido. Sin mi el futuro de la gente no se decide y pueden pasar cosas malas si no cumplo con mi trabajo. Lo triste es que después de eso la gente se olvida de mí, es triste, si, pero yo fui la elegida para tener que soportar este sufrimiento...

- Parece que ya me falta poco para llegar, me quede de ver con 5 chicos, amigos míos, hoy haré salir 5 alas, algo que me incomoda es que entre esos 5 chicos hay uno al que le tengo mucho afecto, se olvidará de mi después de hacer mi trabajo, aaaaah bueno, no tengo más opción que dejarlo ir. 

-Hola  Yami - Me dijo Hajime mientras me veía con una sonrisa en su rostro.

- Hola, nos vamos?

- Si!!- Dijeron todos al mismo tiempo

No quería que Hajime se olvidara de mí, por eso decidí sacar sus alas al final, para poder disfrutar estos últimos momentos con el. Espero que ninguno de estos chicos tenga un mal futuro, yo creo que lograrán algo grande en la vida. 

Mientras íbamos caminando empecé a hacer mi trabajo, Hotaka el chico más alto de todos sería el primero. Cuando saco las alas de alguien me da coraje, por supuesto, como no va doler sacar una alas gigantescas de tu espalda, aaah, que sucede con este mundo, en serio.

-Hotaka puedes venir un momento - Le tome del brazo y dejamos a los otros chicos continuar.

- ¿Qué pasa Yami? 

- Voltéate por favor - Le dije mientras le daba vuelta.

- Perdón Hotaka - Dije con una cara de tristeza.

- ¿Por q.......

Y antes de que preguntara empece a sacarle sus alas, vi una pequeña pluma blanca mientras se las sacaba.

- AH!!! QUÉ ESTA PASANDO!!! - Gritaba Hotaka

- Perdóname, ya casi se acabará el dolor.

No podía ni abrir sus ojos del dolor, ya quería acabar, pero sus alas eran inmensas. Después de este sufrimiento una gloriosas alas blancas habían salido. Por supuesto, él ya no sabía quién era, vi su cara de confundido y le dije.

- Tus amigos están por allá.

- Gracias - Dijo sin reconocerme.

Me uní a ellos pero Hotaka no podía ni verme, había desaparecido de sus memorias, esos tiempos juntos habían sido borrados con facilidad. El siguiente será Katsuo, el más pequeño de nosotros, el puede hacer que un ambiente pesado se vuelva el más divertido. Pobre chico...

- Katsuo quieres un helado?- Le dije intentando ocultar mi cara de tristeza.

- Por supuesto, muchas gracias Yami!! - Me dijo muy emocionado.

- Sigan ustedes ahorita los alcanzamos- Les dije a los chicos.

- Claro- respondió Hajime

Le fui a comprar su helado favorito a Katsuo, tenía que irme a un lugar sin gente para que nadie vea este acto tan desesperante. 

Me puse atrás de Katsuo y le dije - Muchas gracias por ser un gran amigo mío.

Confundido nada más me dijo- De nada. - Sin saber que es lo que estaba pasando, el solo se concentraba en comer su helado. Toque su pequeño hueso de la espalda para poder sacarlas...

-Perdóname- Dije sin que me escuchara.

- AH!!! - Un grito muy agudo salió, en serio lo siento Katsuo. Mientras sacaba sus alas vi como había tirado su helado. Sus alas eran blancas y pequeñas, muy bonitas.

Ese tipo de alas son las que todo este tiempo he anhelado, quiero unas alas igual de blancas...

- Ven te llevo con tus amigos. -Le dije.

El día transcurría y solo había sacado 2 alas, no puedo seguir, en serio es agotador hacer esto, por eso decidí seguir el camino con los chicos y seguir mañana con esta asquerosa tarea. 

-Adiós- Les dije a todos.

Espere a que todos se fueran y acompañe a Hajime a su casa, me había hecho el honor de llevarme a mi casa.

Cuando llegamos me despedí de él, pero mi obsesión por tenerlo a salvo me ganó por eso saqué mis feas alas negras para protegerlo desde el cielo. Lo veía hablar con alguien mientras manejaba.

Un chico estaba cruzando la calle y Hajime no lo notaba.

- Por qué no lo ve!!- Dije mientras agarraba al niño para llevarlo al otro lado de la calle.

- Graci...- Dijo el chico, pero no acabó la palabra al ver mis alas.

- No le digas a nadie lo que viste hoy, si no te creerán loco.- Le dije mientras le guiñaba un  ojo. Lo único que hizo fue agitar la cabeza diciendo que si con la boca abierta.

Había perdido de vista a Hajime, lo busqué y busqué , parece que llegó a su casa y cansada de buscar me fui a la mía para poder dormir.

- Que día tan agotador...