Esta vez es el turno de la venganza, pero un pequeño error traerá graves consecuencias, Ethan y Grayson planean una broma para las cumpleañeras Anne y Alli, una broma que se saldrá de control.
Ahora los gemelos deben enmendar su error con la ayuda d...
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Grayson pega el último trozo de cinta adhesiva al papel y retrocede para observar su trabajo.
—¡Ethan, ya terminé!—sonríe entusiasmado.
—Mmh, ¿se supone que es un oso de peluche?—Ethan hace una mueca.
—Sip.
—Parece mierda—responde observando el oso de peluche que ahora estaba envuelto en un papel rosa con puntos blancos—, parece mierda envuelta en más mierda.
—La idea es que sea sorpresa—dice sonriendo conforme—, que Anne no sepa lo que hay dentro.
—Entonces...buen trabajo hermano—Ethan pone su regalo para Allison sobre la mesa—. Pero Anne se decepcionará al ver el hermoso, increíble y super genial regalo que le daré yo a su hermana.
El regalo para Allison estaba dentro de una cajita con corazones azules. Grayson lo abre con cuidado para ver qué "hermoso, increíble y super genial" regalo tenía su hermano para la chica.
—¿Es en serio, Ethan? ¿chocolate?—Grayson mira a su hermano y niega con la cabeza.
—Seh—Ethan sonríe—, delicioso chocolate, ¿a quién no le gusta el chocolate?
—A las chicas no les gusta que les regalen chocolate para sus cumpleaños, E—dice Grayson sacando el chocolate de la cajita—. Es como el regalo de último momento.
—Estuve toda la noche pensando en qué regalarle—responde algo ofendido con el ceño fruncido.
—Bueno... ¿me lo puedo comer?—Grayson comienza a abrir el envoltorio del chocolate.
—No.
Grayson continúa abriendo el envoltorio con una sonrisa traviesa.
—¡Es para Allison!—Ethan intenta arrebatárselo pero su hermano lo esquiva—, ¡ya basta Grayson! ¡lo vas a arruinar!
Unos golpes en la puerta de su departamento interrumpen la discusión, Ethan va hasta la puerta dando zancadas y bufando.
—Si te lo comes , te asesinaré—dice antes de abrir la puerta.
Frente a él habían tres hombres vestidos de negro, uno de ellos llevaba pasamontañas. Los otros dos llevaban el rostro descubierto, eran altos y de expresión ruda, a excepción del hombre con el pasamontañas, que era más pequeño y delgado.
—Eh... ¡Grayson!
—¡No me comí el chocolate!
—¡Ven!—grita con nerviosismo.
Grayson aparece, lame sus labios para limpiarse una mancha de chocolate que tenía ahí. Ethan lo mira enfadado.
—¿Ethan y Grayson?—pregunta uno de los hombres.
—¿Qué?—dice Grayson sin entender.
—¡Que si son Ethan y Grayson!—repite el hombre subiendo el tono.
